En la primera sesión parlamentaria en la Asamblea murciana celebrada tras la ruptura de la coalición de Gobierno entre PP y Vox en la Región, ambas formaciones han vuelto a estrechar lazos y han aprobado -con 28 votos a favor, por 13 en contra de PSOE y Podemos- sancionar a Víctor Egío con un mes sin empleo y sueldo después de que el portavoz de Vox, Rubén Martínez Alpañez, le echara en cara en el pleno del pasado 26 de junio “los seis meses” que había estado “sin aparecer por la Cámara” a causa de una baja de paternidad.
“Voy a ser el primer diputado expulsado en la historia de este Parlamento. He sido condenado a un juicio sumarísimo por el diputado que me atacó con sus bulos y por la presidenta que no me dejó defenderme. Sin testigos, sin derecho a apelación, han convocado este pleno exprés para condenarme y nada de lo que diga o haga va a cambiar algo”, ha expresado el propio Egío durante su turno de intervención, mirando fíjamente en todo momento al portavoz ultra. El diputado morado ha concluido su intervención quedándose en silencio y rodeándose las manos metafóricamente con una cadena metálica.
Aquella afirmación de Alpañez, la de “los seis meses”, no fue sino una acusación falsa y con un motivo infundado. Egío solicitó, tras escucharla, un turno de palabra para responder “por infames alusiones” a las palabras del ultraderechista y alegar que había estado “seis semanas ejerciendo el derecho a la conciliación”. Pretendía ampararse en el artículo 93 del reglamento del Parlamento.
Pero la presidenta de la Mesa, Visitación Martínez (PP), no le dejó intervenir, argumentando que había dado comienzo a un turno de votaciones y que éste no podía ser interrumpido. “En el debate se cita un interviniente a otro y no son alusiones”, esgrimió entonces la máxima mandataria de la Asamblea para rechazar la petición del diputado morado. No obstante, Egío siguió hablando a gritos desde su escaño. La presidenta dio la orden expresa de su expulsión del Hemiciclo, pero éste se negó a abandonarlo y la sesión fue suspendida.
Fue en la Comisión del Estatuto del Diputado del Parlamento autonómico, una semana más tarde, el 4 de julio, y a petición de la propia Martínez, cuando entre PP y Vox -con Martínez Alpañez presente- consideraron, por mayoría, que Egío incurrió en infracciones “de gravedad suficiente” para ser constitutivas “de una conducta sancionable”: se propuso, con el beneplácito de ambas formaciones, la suspensión de las funciones parlamentarias del diputado morado durante un mes, “con pérdida de la asignación económica que percibe”.
El dictamen alcanzado en aquella Comisión ha sido hoy refrendado en sede parlamentaria por la misma mayoría que avalaba las decisiones del Ejecutivo murciano hasta antes de la ruptura que protagonizó Vox el pasado viernes. Egío no cobrará ni un solo euro por su trabajo como diputado durante el próximo mes.
Vox continúa su ataque y carga contra la conciliación
Pero la cosa no se ha quedado únicamente en la rúbrica de la sanción y en la denuncia visual de Egío. La diputada de la formación ultra, María José Ruiz, lejos de calmar las aguas ha proseguido con la ofensiva de su partido contra diputado morado y contra el derecho a la conciliación familiar. “Una cosa es conciliar y otra ausentarse del trabajo. (Egío) No ha acudido a sus obligaciones desde marzo. Su forma de actuar de golpes en el pecho por ejercer el derecho a la paternidad no le hace mejor padre”, ha expresado Ruiz, justo antes de afirmar que “mucha gente piensa que trabajar y ser padre puede ir uno en perjuicio de otro”. La diputada ha dado a entender, durante toda su intervención, que las obligaciones laborales deben estar por encima del tiempo para el cuidado de los hijos.
Sin mostrarse en desacuerdo con su exsocia de Vox, el portavoz del PP, Joaquín Segado, se ha limitado a apelar a las normas de la Cámara. “Imagínense que no sancionamos a Egío. Pasado mañana, cuando a alguien no le guste lo que se vaya a votar monta un número similar e impide el funcionamiento normal de esta institución democrática ¿Es esto lo que queremos?”, se ha preguntado.
En solidaridad por Egío, Carmina Fernández, del PSOE, ha denunciado también que los escaños socialistas han sido “víctimas de los insultos de la ultraderecha”. “Este pleno no puede convertirse en venir a tirar insultos continuamente para obtener notoriedad pública”, ha afirmado en dirección a Vox.
Recurso al Constitucional
Podemos va a presentar, “de forma inmediata” y después de la decisión hoy adoptada por la Asamblea, un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional “denunciando este proceso viciado desde el principio”.
“Ha llegado el momento de pararle los pies a una ultraderecha desatada, a la que el PP le ha puesto una alfombra roja y le ha dado barra libre en esta institución”. “Hasta en los regímenes más autoritarios del mundo cualquier acusado tiene más derechos que los que ha tejido mi compañero para defenderse”, ha expresado en este sentido la portavoz del grupo mixto, María Marín.
Marín ha reaccionado con dureza, asimismo, a las palabras de la diputada de Vox. “Demuestra ser cómplice de la opresión de las mujeres. Su discurso ha sido una vergüenza”.