El obispo de la Diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, se vacunó contra la COVID-19 según confirma la propia institución eclesiástica en un comunicado remitido a los medios, a pesar de no estar incluido en los grupos establecidos por el protocolo del Ministerio de Sanidad. La dosis habría sido administrada en el centro en el que se vacuna cada año y que pertenece a la propia Diócesis, la residencia de mayores y centro de día Hogar de Betania de Murcia.
A este centro, el obispo acude con “asiduidad ya que es el presidente de su patronato, la última visita la realizó el pasado 30 de enero para celebrar la Eucaristía junto a los residentes”, señala el escrito difundido: “Días previos a su vacunación, el obispo rellenó el consentimiento necesario para que la Consejería de Salud autorizase su vacunación”.
Según dijo una fuente religiosa a este periódico, se vacunó “todo el patronato de la residencia, formado por el vicario de Murcia y párroco de San Pedro Apóstol, José Sánchez Fernández; el capellán de la residencia de ancianos, a su vez párroco de Nuestra Señora de Loreto, Tomás Cascales Cobacho; y un grupo de laicos”. El capellán de la residencia de ancianos Hogar de Betania había sido anteriormente secretario-canciller del Obispado de Cartagena.
Según los detalles ofrecidos por el periódico La Verdad, Lorca Planes se puso la vacuna en esta residencia de ancianos el pasado 19 de enero. Ese día personal sanitario del Servicio Murciano de Salud (SMS) había acudido a esa residencia para poner la segunda dosis a los empleados y residentes a través del servicio de vacunación municipal del Ayuntamiento de Murcia. Entonces el obispo se puso en la cola y recibió la dosis. Al identificarse, uno de los sanitario reconoció el nombre del máximo responsable de la Diócesis de Cartagena. En el listado enviado por la residencia a la Consejería murciana de Salud se registró el nombre de Lorca Planes en calidad de capellán.
Desde la Diócesis de Cartagena aseguran que el obispo, que “en ningún momento creyó estar actuando mal y que jamás contempló la posibilidad de que pudieran faltar vacunas, decidió no ponerse la segunda dosis, que tendría que haber recibido estos días”.
“Es un golpe duro y va a tener mucho impacto moral. Esto va a generar aún más desafección hacia la Iglesia. Hay muchos curas mayores que él y todo el mundo se quiere poner la vacuna”, señaló otra fuente religiosa. Lorca Planes (Murcia, 1949) fue nombrado obispo de Cartagena en julio de 2009 y tomó posesión el 1 de agosto del mismo año.