El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, ha afirmado que no descarta la “vía legal” en caso de que el Gobierno de Navarra no “quiera sentarse” a negociar sobre las competencias que el Ayuntamiento podría dejar de ejercer sin la financiación derivada de la Carta de Capitalidad, cuya eliminación está prevista en la nueva financiación local, y sobre cómo se pagarían los costes de esas competencias a partir de la aprobación de la nueva financiación.
Así lo ha manifestado Maya este martes en rueda de prensa, donde ha indicado que “si nadie lo remedia, y parece que no”, el Parlamento de Navarra aprobará este jueves la derogación de la Carta de Capitalidad de Pamplona tras un debate en el que “Navarra Suma va a ser el único grupo que va a defender” su mantenimiento.
“Todavía no está ni aprobada la derogación, pero nosotros estamos trabajando permanentemente para clarificar todo esto y finalmente poder sentarnos con el Gobierno. Si el Gobierno no se quiere sentar con nosotros tendremos que ver cómo lo hacemos y ahí sí que cabe la vía legal. Es decir, si es tu obligación ejercerlas -esas competencias- tendré que obligarte a que las ejerzas, o si no, que me la pagues”, ha señalado.
Maya ha recordado que envió una misiva a la presidenta de Navarra, María Chivite, solicitando la creación de un grupo de trabajo entre el Ejecutivo foral y el Ayuntamiento de Pamplona para determinar las consecuencias de la supresión de la Carta de Capitalidad, cuya respuesta fue “que no procedía crear ese grupo de trabajo”.
“Volví a insistir en otra carta con más detalle, y todavía no he tenido respuesta. Nosotros no vamos a trabajar para dejar de ejercer competencias, pero sí para que esas competencias, de acuerdo con la ley, se nos paguen. Y si no quieren sentarse con nosotros, tendremos que actuar de la manera que sea para que los ciudadanos de Pamplona, con sus impuestos, no estén pagando competencias que tiene que pagar Navarra”, ha subrayado.
El alcalde ha esperado que “esta brecha que ha generado el Gobierno en relación a Pamplona con esta decisión unilateral se vaya cerrando”, aunque a su juicio “tiene difícil sutura”. “Pamplona siempre ha sido leal con el Gobierno de Navarra, es un insulto decir que este nuevo modelo ya no está centrando en Pamplona y está centrado en el conjunto de los ayuntamientos de Navarra”, ha señalado, tras añadir que “la pandemia ha sido una demostración evidente de que Pamplona ha estado ahí y ha asumido servicios que no le correspondía”.
“No tenemos ninguna gana de que la derogación de la Carta de Capitalidad suponga el romper unas buenas relaciones que hemos tenido siempre con el Gobierno, pero tampoco nos vamos a dejar, porque los que han roto han sido el Gobierno, no nosotros. Y sin podernos sentar a hablar de algo tan grave. No nos podemos acostumbrar a esas cosas”, ha remarcado.
Maya ha asegurado que la supresión “es una decisión puramente política” que no se encuentra basada en “ninguna justificación técnica o política” y que “va a acabar” con 25 años de vigencia de la Carta de Capitalidad. “El día 2 de diciembre se hubieran cumplido 25 años, y en lugar de celebrarlo, vamos a, tristemente, vivir cómo se va a derogar por una decisión unilateral, sin ningún tipo de consenso con el Ayuntamiento y a todas luces por una imposición de EH Bildu a María Chivite”, ha subrayado.
Tras destacar que la importancia de dicha carta radica en que “define un estatus para Pamplona” y le otorga “singularidad” como capital de Navarra, el alcalde ha asegurado que “casi todas las capitales de comunidades autónomas (e incluso diputaciones provinciales) cuentan con mecanismos similares a la Carta de Capitalidad de Pamplona”. Maya, que ha citado ciudades como Vitoria, Zaragoza, Toledo, Santiago de Compostela, Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria o Santa Cruz de Tenerife, ha asegurado que otras capitales como Valencia, Santander, Oviedo y Cuenca “están trabajando para tenerla”.
Además, ha añadido que “se quiere hacer ver” que las trascendencias son económicas, pero que en realidad “tiene una trascendencia mucho mayor”. “Lo más grave de todo es el ninguneo al que ha estado sometida la ciudad de Pamplona con esta supresión. Nos usurpan un estatus singular en un ataque sin precedentes en 25 años contra Pamplona”, ha criticado.
Por todo ello, ha anunciado que los próximos días pondrán en marcha una campaña de comunicación para informar a la ciudadanía de las “consecuencias” de esta decisión. En respuesta a los periodistas, ha señalado que esto no va a influir en la financiación para las fiestas de San Fermín.