La Audiencia de Navarra comunicará la sentencia de la manada este jueves 26 de abril. Así lo han comunicado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, que informan que el presidente de la Sección Segunda de la Audiencia leerá el fallo en audiencia pública.
El juicio a los cinco integrantes de la manada, acusados de violar grupalmente a una mujer en los sanfermines de 2016, se celebró el pasado noviembre a puerta cerrada, salvo las dos últimas jornadas de conclusiones. Cinco meses después, el presidente de la Sección Segunda de la Audiencia de Navarra leerá el fallo este jueves a la una del mediodía en el Palacio de Justicia de Pamplona en audiencia pública. Durante este tiempo, los cinco acusados han estado en prisión preventiva, un estado que se ha prorrogado en varias ocasiones.
La acusación particular y la fiscalía piden hasta 25 años de prisión contra los cinco integrantes de la manada por un delito continuado de violación, delito contra la intimidad y robo con violencia. Las defensas de los acusados, por contra, aseguran que se trató de sexo consentido y reclaman la absolución de sus cinco clientes.
“La intimidación fue gravísima e impidió resistencia o huida, no le quedó más remedio que someterse. La denunciante no consintió”, defendió la fiscal del caso, Elena Sarasate, en su informe final ante la Sala, en el que dió total credibilidad a la víctima. Se cumplen, dijo, todos los parámetros para que la declaración de esta mujer de ahora 20 años sirva como prueba de cargo.
Sarasate mantuvo su petición de 22 años y diez meses de prisión para cada uno de los acusados por los delitos de agresión sexual, delito contra la intimidad y el robo del móvil. Solicitó, además, responsabilidad civil por el “sufrimiento moral” de la víctima, no solo por las consecuencias de la agresión y la grabación, sino también por el seguimiento que la defensa encargó a detectives y que la mujer conoció en el juzgado. “Faltaría más, una mujer tendrá que salir y hacer su vida”, defendió Sarasate ante el cuestionamiento que las defensas hicieron de la vida que la mujer hizo posteriormente a la agresión.
Para los abogados de la manada la mejor defensa fue el ataque a la víctima: lo que hizo durante aquella noche, antes y después de los hechos, la forma de comportarse durante su declaración hace unos días, pero su vida posterior. Su relato, sostienen, no es creíble, está lleno de incoherencias y su comportamiento no es propio de una mujer que ha sufrido una agresión sexual.