El presidente de UPN y portavoz de Navarra Suma, Javier Esparza, tal y como anunció este lunes, no ha acudido a la reunión a la que había sido convocado este miércoles por el Gobierno de María Chivite para un primer acercamiento de cara a los presupuestos en los que el Ejecutivo ya está trabajando tras aprobar el techo de gasto. Esparza lazó un ultimátum a Chivite y aseguró que no negociaría si antes no rompía con EH Bildu, y así ha sido. Navarra Suma no ha acudido al Palacio de Navarra, al que sí ha ido la coalición abertzale. Tras una reunión de algo más de una hora, ambas partes coinciden en hacer una valoración positiva del encuentro, que allana el camino hacia el cuarto pacto presupuestario de la legislatura.
En la reunión, de la que este año sí hay fotografía, los parlamentarios de EH Bildu Bakartxo Ruiz, Laura Aznal y Adolfo Araiz han entregado a los representantes del Gobierno presentes en el encuentro, Elma Saiz (portavoz y consejera de Economía y Hacienda) y los dos vicepresidentes, Javier Remírez y José María Aierdi, un documento en el que se incluía un balance de los “compromisos que no se han cumplido y las partidas que no se han ejecutado” de las cuentas del 2022, que EH Bildu considera “prioritario” que se incluyan ya en el anteproyecto del próximo ejercicio. Cuestiones como un informe sobre las transferencias pendientes con el Estado y su calendarización o un análisis de los beneficios fiscales del Impuestos de Sociedades.
“Ha sido una primera toma de contacto, todavía queda mucho por discutir y negociar”, ha apuntado la portavoz de EH Bildu, Laura Aznal, quien ha destacado que la conversación se ha desarrollado en términos “cordiales”. “No esperábamos menos puesto que somos el único grupo de la oposición que ha dado el paso y se ha presentado a la reunión y eso no es baladí”, ha añadido. Conscientes de que sus votos son trascendentales para la aprobación de los presupuestos, Aznal, ha señalado que encaran la negociación siendo “exigentes”.
Como en años anteriores, las principales discrepancias se encuentran en materia de fiscalidad, donde EH Bildu, entre otras cosas, reclama una subida del Impuesto de Sociedades, postura que el Gobierno rechaza. “No parece el momento más adecuado”, ha señalado la consejera de Economía y Hacienda, Elma Saiz. Desde la coalición abertzale ha criticado esa “postura inmovilista” y han destacado que tratarán de que el Ejecutivo foral cambie de postura.
Con todo, desde el Gobierno de María Chivite también hacen una valoración positiva del encuentro y se muestran confiados de poder alcanzar el que sería el cuarto acuerdo presupuestario con EH Bildu. En las próximas semanas la coalición abertzale se reunirá con los distintos departamentos del Gobierno para incluir partidas en el anteproyecto de ley, al igual que hicieron en el ejercicio de 2022. “No queremos incidir solo vía enmiendas”, ha reclamado Aznal.