La conexión por AVE con Euskadi es 1.000 millones más barata por Vitoria
El ministerio de Fomento calcula que el tramo navarro del corredor ferroviario de alta velocidad puede tener un coste estimado entre los 2.434 millones, que costaría la infraestructura si se conecta con la ‘Y’ vasca por Vitoria, y los 3.386 millones a los que ascendería el TAV en el caso de que se opte por conectar con la ‘Y’ vasca por el trazado de Ezkio. Son las dos grandes cifras que está dando a conocer el propio ministro Iñigo de la Serna y que vincula a la fecha de 2023 para tener concluidos los 200 kilómetros de alta velocidad planeados por territorio foral, momento en que entraría en servicio también el AVE en Euskadi. El ministerio ha comenzado ya a notificar a varios ayuntamientos navarros, como el de Marcilla, el expediente de expropiación forzosa que se va a poner en marcha para hacerse con los terrenos necesarios para la construcción de los dos subtramos entre Villafranca y Olite.
Según las previsiones que maneja el ministerio, este mes de octubre debería estar listo el estudio informativo del tramo sur del TAV navarro, que conecta Zaragoza y Castejón a través de 86 kilómetros de vía con un coste calculado en 825 millones. La intención de Fomento es poder someter este tramo a información pública en 2019.
Con un horizonte mucho más cercano, el tramo entre Castejón y Pamplona podría tener trabajos licitados este mismo año. El propio ministro ha calificado este tramo de “especial”, aunque no ha concretado si es por las desavenencias surgidas entre su ministerio y el Gobierno foral en las negociaciones para firmar un nuevo convenio sobre el TAV. El caso es que Fomento quiere licitar este año los dos subtramos citados, y para ello ha comenzado con el proceso de expropiaciones, pero para poder ofertar los trabajos necesita, primero, los proyectos constructivos que está terminando de elaborar el Gobierno foral y que deben ser enviados a Fomento el 15 de octubre y el 15 de noviembre; además, es necesario financiar tanto las expropiaciones como los trabajos de construcción que se liciten. Y el Gobierno del cuatripartito ya ha anunciado que no incluirá un solo euro para la construcción del TAV en sus presupuestos para 2018, pero tampoco parece que tenga oportunidad de hacerlo el ministerio de Fomento en los presupuestos generales del Estado, cuya negociación está actualmente paralizada.
El último tramo del TAV navarro conectará Pamplona con la ‘Y’ vasca, y en la opción que se elija para esta conexión estará la diferencia de 1.000 millones en el coste de la infraestructura. Según la información de Fomento, conectar Pamplona con Vitoria tendría un coste de 719 millones, mientras que realizar el trazado por Ezkio tendría un coste de 1.671 millones. El ministerio está pendiente de tomar esta decisión, de acuerdo con las administraciones vasca y navarra, cuando concluya el estudio informativo del tramo, previsto para finales de año.
