Sin prostitución no hay trata. No trates con la prostitución

Este Día Internacional contra la Trata de Seres Humanos, la Plataforma Navarra de Mujeres por la Abolición de la Prostitución alza la voz para enfatizar la vinculación entre prostitución y trata con fines de explotación sexual, para dirigirse a los hombres que demandan prostitución como responsables de la existencia de la trata, y para exigir a las administraciones medidas concretas encaminadas a la abolición de la prostitución.

La trata es un fenómeno de dimensiones globales que atenta frontalmente contra los derechos humanos, cuando, abusando de una situación de extrema necesidad, vulnerabilidad, superioridad o edad de las personas tratadas, mediante el empleo de la violencia, intimidación o engaño se logra obtener un beneficio económico de estas personas, explotándolas, bien con fines laborales, sexuales, mendicidad, la esclavitud, actividades delictivas, extracción de órganos o celebración de matrimonios forzados.

En todos los casos y circunstancias, la trata supone una situación de abuso de otra persona y una vulneración de los derechos humanos.

El Parlamento Europeo ya advirtió en su Resolución de 26 de febrero de 2014, sobre explotación sexual y prostitución y su impacto en la igualdad de género, que la inmensa mayoría de las personas tratadas en el mundo son mujeres y niñas y lo son con fines de explotación sexual -el 62% de las víctimas de trata-, siendo el 96% de ellas mujeres y niñas. Un alto porcentaje de estas mujeres tienen entre 13 y 25 años, siendo introducidas en la prostitución menores de edad.

Estas son las razones por las cuales hacemos hincapié de manera especial en la lucha contra la trata con fines de explotación sexual, porque es la que afecta específicamente a mujeres y niñas en todo el mundo.

Si no existiera la prostitución no existiría la trata con fines de explotación sexual. La trata es el mecanismo por el que los prostíbulos, pisos y calles de nuestro país existen mujeres de todos los orígenes, etnias y edades, en su inmensa mayoría procedentes de otros países de fuera de Europa a excepción de las que son tratadas desde los países de la Europa emergente -Rumanía, Bulgaria, Ucrania.

Naciones Unidas viene destacando desde su informe sobre “Cuestiones concretas de derechos humanos: formas contemporáneas de esclavitud”, elaborado por Paolo Sergio Pinheiro en 2003, que la demanda de prostitución es la verdadera responsable de la existencia de la trata con fines de explotación sexual, recomendándose actuaciones para frenar o acabar con la demanda si queremos eliminar la trata con fines de explotación sexual.

La demanda de prostitución es en un 99% masculina. Por ello pedimos que los hombres NO TRATEN CON LA PROSTITUCIÓN.

Reclamamos a las administraciones navarras el desarrollo de medidas específicas para prevenir la demanda de prostitución, para prestar apoyo real que permita la salida de la prostitución de las mujeres y las niñas y para establecer mecanismos de detección en todos los operadores sociales que permitan desenmascarar las redes de trata, en el marco de la Ley Foral 14/2015, de 10 de abril para actuar contra la violencia hacia las mujeres.

Este Día Internacional contra la Trata de Seres Humanos, la Plataforma Navarra de Mujeres por la Abolición de la Prostitución alza la voz para enfatizar la vinculación entre prostitución y trata con fines de explotación sexual, para dirigirse a los hombres que demandan prostitución como responsables de la existencia de la trata, y para exigir a las administraciones medidas concretas encaminadas a la abolición de la prostitución.

La trata es un fenómeno de dimensiones globales que atenta frontalmente contra los derechos humanos, cuando, abusando de una situación de extrema necesidad, vulnerabilidad, superioridad o edad de las personas tratadas, mediante el empleo de la violencia, intimidación o engaño se logra obtener un beneficio económico de estas personas, explotándolas, bien con fines laborales, sexuales, mendicidad, la esclavitud, actividades delictivas, extracción de órganos o celebración de matrimonios forzados.