EH Bildu intentará crecer en el sur de Navarra con una candidatura en Tudela doce años después

Andoni Amadoz

0

La capital de la ribera navarra y segunda localidad más poblada de Navarra contará con una candidatura de EH Bildu en las elecciones municipales de 2023 por vez primera desde el fallido intento bajo el nombre de Bildu en 2011. La coalición tiene una gran implantación municipalista en Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y también en amplias zonas de Navarra, pero ahora quiere desembarcar en la zona menos abertzale y menos vascoparlante de su ámbito.

La coalición soberanista lanzaba la noticia este lunes, al tiempo que daba a conocer quien, presumiblemente, será la cabeza de lista si lo refrendan sus bases: Edurne León Sánchez.

La decisión llega tras cerrar el proceso para presentar candidaturas a las alcaldías del Valle de Egües y Tudela. Así, las únicas dos opciones que se presentaron fueron las de Ainara González Hervás y Edurne León Sánchez, respectivamente. Ahora, las bases de la coalición contarán con tres días para votar y mostrar su conformidad a las candidaturas lideradas por estas dos mujeres. Los procesos de votación se han abierto este jueves y permanecerán disponibles hasta este sábado.

Ante esta nueva situación, la propia León ha difundido un vídeo en Twitter agradeciendo al partido y a las bases la confianza depositada en ella, recalcando que hay otra forma de hacer las cosas y que trabajará para hacer de Tudela una ciudad “más justa, feminista, sostenible y de todos y todas”. En palabras de León, el paso que ha dado EH Bildu en la capital ribera es un paso valiente, pero coherente, de la mano del trabajo que llevan realizando durante los últimos años fuera de las instituciones. Es un escenario que no se conocía desde la década de 1990. En concreto, en 1999 la izquierda abertzale, cuya marca era la luego ilegalizada Euskal Herritarrok (EH), fue de la mano de Batzarre, y obtuvo dos concejales. Hasta entonces, los intentos de Herri Batasuna (HB) por conseguir asientos en el consistorio de Tudela se quedaban en nada, llegando a alcanzar, como mucho, el 3% de los votos emitidos en total. Peor fue el escenario para Eusko Alkartasuna (EA), otra de las patas de la actual EH Bildu, que también se presentó durante la década de 1990, pero con resultados todavía más pequeños, apenas consiguiendo el 0,5% de los votos escrutados.

Durante estos últimos años, sin embargo, ninguna opción de la izquierda abertzale se ha presentado a las elecciones de la segunda ciudad de Navarra (salvo la marca anterior a EH Bildu, Bildu, en 2011, sin concejales), en donde los electores soberanistas han tenido como opción más cercana otros partidos a la izquierda del PSN, que fue la opción preferida por los tudelanos desde la Transición y hasta la llegada al poder de UPN en 1995. Desde entonces, los regionalistas se han hecho con el poder ininterrumpidamente, con un breve paréntesis tras las elecciones de 2015, en las que Izquierda-Ezkerra (la marca local de IU) se hizo con la alcaldía.

Indiferencia a la izquierda

Precisamente la marca que llevó a Eneko Larrarte (I-E) a hacerse con el palo de mano de la casa consistorial de Tudela, se presentará ahora en una coalición más amplia llamada Contigo Zurekin y que incluye a la propia I-E, a Podemos, a Batzarre y a cuadros independientes, y que tendrá que competir ahora contra la marca de EH Bildu. Sin embargo, desde Contigo Zurekin, la confluencia de Izquierda-Ezkerra, Podemos, Batzarre e independientes, no ven como mala la noticia de que la coalición abertzale presente candidatura propia. Para Olga Risueño, concejal de Batzarre en el ayuntamiento de Tudela, siempre es bueno que haya muchas opciones, por ser reflejo de pluralidad, y puntualiza que no le parece ni bien ni mal que EH Bildu se presente con candidatura propia a las próximas municipales de Tudela, ya que, considera, representan dos proyectos distintos. Alberto Lajusticia, concejal de Izquierda-Ezkerra en el consistorio ribero, es de la misma opinión que su compañera de filas. Para él, Contigo Zurekin y EH Bildu representan ahora dos espacios totalmente diferentes, y no teme ante la posible pérdida de votos. Las urnas lo decidirán, pero se enfrentan a ellas sin miedo.