Finalmente se han registrado cuatro candidaturas para encabezar la lista de UPN en las próximas elecciones forales. Caras más o menos conocidas y con diferentes trayectorias dentro del partido y de la política navarra. Pero finalmente solo uno representará a la formación regionalista en las próximas elecciones, y dependerá del Consejo Político de UPN, un órgano del partido integrado por los cabezas de lista del partido, todos los cargos públicos del gobierno, un representante de cada asamblea local y 75 afiliados elegidos en un congreso.
Los aspirantes reflejan distintas opciones dentro de un partido que ha visto retirarse a su principal candidata, Yolanda Barcina, después de haber confirmado que continuaría al frente de la formación. Un paso atrás interpretado como un guiño a otro futuro pacto con el PSN tras las dificultades experimentadas en su gobierno en minoría sin apoyo en el Parlamento. Pero, ¿quiénes son los nuevos aspirantes?
José Javier Esparza: el favorito
Esparza es consejero de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local del Gobierno Yolanda Barcina. Desde UPN destacan la capacidad de diálogo y acuerdo de Esparza, algo de lo que requerirá UPN para un posible entendimiento con el PSN tras las próximas elecciones forales.
ha sido el primero en registrar su candidatura. Compañeros del Gobierno como Lourdes Goicoechea o Sánchez de Muniáin han mostrado su simpatía hacia él ya que es su compañero en el ejecutivo navarro. Esto es precisamente lo que le presenta como favorito, su cercanía a Barcina, pese a asegurar su “imparcialidad”, controla los órganos de decisión del partido. Parece, hasta el momento, que es el que más papeletas tiene de liderar esa lista que intentará mejorar el descalabro del navarrómetro. Esparza, cercano también a Miguel Sanz, cuenta con el beneplácito de las dos caras más visibles dentro de los círculos de poder de la formación regionalista.
Juan Ramón Rábade: la sorpresa
Así lo ha expresado el propio Rábade, director del hospital Reina Sofía de Tudela. Asegura que la suya es la candidatura de “la unidad, la integración, la honradez, la honestidad y la renovación”. A pesar de ser el candidato menos conocido, el propio Rábade asegura que se ha presentado porque se lo han pedido compañeros de partido que llevan “años trabajando” y que no es un “verso suelto” aunque tampoco pertenece a “ninguna familia de UPN”.
Rábade encarna al candidato desconocido, el candidato sorpresa que defiende la regeneración democrática y quiere protagonizar la “renovación” del partido. Rábade preside el Comité de Garantías y Disciplina del partido, ha sido director general de Interior de los dos últimos gobiernos de Sanz, director general de salud dos legislaturas y dirige el hospital de Tudela tras la llegada al ejecutivo de Yolanda Barcina.
Amelia Salanueva: la corriente crítica
La senadora Amelia Salanueva se ha presentado en el último momento como candidata, aunque su propuesta igual es retirada. Así lo ha expresado la propia Salanueva ya que si no se realizan primarias con todos los afiliados retirará su candidatura. Ha solicitado a los otros dos candidatos que se sumen a la petición de una elección más democrática que cuente con las bases del partido en lugar de ser elegidos por un Comité formado por cargos activos en la política navarra, partidarios, la mayoría, de la corriente dentro de UPN liderada por la presidenta. Amelia, sin embargo, es una candidata cercana a Miguel Sanz y a la corriente crítica del partido, quien comenzó las presiones para que Yolanda Barcina se retirara de la carrera electoral.
Salanueva lleva pidiendo primarias desde que Yolanda Barcina anunció que no sería la candidata a la reelección, aunque parece que dentro del partido no están por la labor de abrir la elección del candidato a todos los afiliados. La senadora considera que el sistema de elección del partido está “desfasado” y quiere que sean los más de 4.000 afiliados los que se pronuncien.
Yolanda Barcina, la persona con mayor poder dentro del partido no está dispuesta a celebrar primarias y que se elegirá de acuerdo con los estatutos, pese a que Salanueva asegura que la elección mediante una votación de las bases sí es compatible con esos estatutos. De hecho, horas después de que Salanueva registrara su candidatura, Barcina ha descartado que se vayan a celebrar primarias.
Alberto Catalán: el veterano
A última hora y sin avisar. Así ha registrado Alberto Catalán su candidatura que será evaluada por segunda vez ya que el actual presidente del Parlamento ya optó a liderar la formación regionalista en la contienda que ganó Yolanda Barcina, aunque de manera ajustada. Aunque los principales órganos del partido los controla Barcina, rival de Catalán en el anterior congreso, lo que todavía no se sabe es cuánta fuerza tendrá este candidato dentro del Consejo Político que tomará, finalmente, la decisión.
La propuesta de Catalán ha llegado a última hora, después de que Salanueva vinculara su candidatura a la convocatoria de primarias y de que Yolanda Barcina reiterara que la decisión está tomada y no incluye una votación abierta a las bases. Según fuentes regionalistas, aunque la dirección del partido está controlada por Yolanda Barcina y Alberto Catalán perdió el último congreso del partido en marzo de 2013, el presidente del Parlamento es el rival más incómodo para el resto de candidatos.