La reina Letizia ha visitado este lunes las localidades navarras de Milagro y San Adrián con motivo del inicio del nuevo curso escolar marcado por la pandemia. En compañía de la presidenta de Navarra, María Chivite, y la ministra de Educación, Isabel Celaa, ambas socialistas, ha visitado dos colegios de la Comunidad foral para presenciar cómo se han adaptado los centros escolares para garantizar una vuelta segura a las aulas. Una visita la de la reina que no se ha cancelado de milagro, ya que el pasado viernes la Casa Real informó de que la princesa Leonor se encuentra en cuarentena a la espera de que se le realice una prueba PCR por ser contacto de una compañera de clase que ha dado positivo. Situación que no ha evitado que la reina se haya podido trasladar hasta Navarra para continuar con su agenda oficial.
La reina, que inicia en Navarra una serie de visitas por el territorio nacional para comprobar cómo se desarrolla el inicio del curso escolar, ha llagado pasadas las 11 de la mañana al CPEIP Nuestra Señora del Patrocinio de Milagro rodeada de fortísimas medidas de seguridad. Allí la esperaban la presidenta de Navarra, María Chivite, el delegado del Gobierno, José Luis Arasti, el alcalde de Milagro, José Ignacio Pardo, el consejero de Educación, Carlos Gimeno, y la vicepresidenta primera del Parlamento Foral, Inmaculada Jurío. A pocos metros de distancia, un centenar de personas con banderas de España le han lanzado algunos vítores y le han deseado que la princesa Leonor se encuentre bien. Una vez en el centro escolar, Letizia ha podido comprobar las medidas adoptadas por el Gobierno foral contra la COVID-19 como los accesos por múltiples puertas para evitar aglomeraciones, los recorridos señalizados dentro de los centros y los espacios acotados en los patios. Una medida esta última que ha servido de poco cuando la comitiva encabezada por la reina ha salido al patio del otro centro escolar que ha visitado este lunes, el IES Ega de San Adrián, donde ha sido inevitable que decenas de alumnos y alumnas se agolparan para intentar estar cerca de Letizia. “Ha sido un poco caótico, estaban todos muy nerviosos por la visita”, resumía una profesora del instituto.
Una visita que una vez más en Navarra ha estado rodeada de polémica tras el reciente anuncio del Gobierno de Navarra de no invitar a los reyes a la entrega del Premio Príncipe de Viana. Una entrega a la que los actuales monarcas fueron invitados hasta la llegada a la presidencia de Navarra de Uxue Barkos (Geroa Bai) en la anterior legislatura. Ahora, María Chivite ha continuado esa línea y tampoco les ha invitado al considerar que en esa fecha “el Premio Príncipe de Viana tiene que centrarse sobre todo en el reconocimiento del premiado, poner el foco en él”, señaló hace unos días el vicepresidente y portavoz del Gobierno, Javier Remírez, que añadió que la relación del Gobierno foral “es muy fluida con la Casa Real, una relación de lealtad institucional”.
María Chivite, que se ha declarado abiertamente republicana aunque “respetuosa con las instituciones que están reflejadas en la Constitución española” y que en una entrevista a elDiario.es declaró que no podía compartir que la máxima representación institucional de España “tenga carácter hereditario” ha vivido hoy su tercera visita de la Casa Real a Navarra en el año que lleva como presidenta.
La visita también ha llegado al Parlamento de Navarra, donde Izquierda-Ezkerra (IU), formación que firmó el acuerdo de Gobierno del actual Ejecutivo foral aunque no forma parte de él, ha presentado una moción en la que se pedía que la Cámara foral rechazara la participación de la Reina Letizia en el acto de apertura del curso escolar y que se solicitara que el modelo de Estado, “incluyendo la jefatura del mismo, sea decidido por la ciudadanía de manera democrática por la vía del referéndum o consulta vinculante”. Una moción que únicamente ha sido apoyada por EH Bildu y Podemos, por lo que no ha salido adelante.