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María Chivite aprueba de la mano de EH Bildu sus primeros presupuestos, pero sin el apoyo de uno de sus socios de Gobierno

El Parlamento de Navarra ha completado este jueves, en el último pleno de febrero y dos meses después del comienzo del curso 2020, la tramitación de los presupuestos para este año. Como era conocido el Gobierno de PSN, Geroa Bai y Podemos han logrado sacar adelante las primeras cuentas de la legislatura merced a la abstención de los siete parlamentarios de EH Bildu y de la única parlamentaria de Izquierda-Ezkerra, que firmó el acuerdo de Gobierno pero que no forma parte del Ejecutivo. Los parlamentarios de EH Bildu han facilitado sus votos en forma de abstención para la aprobación de la ley económica más importante del año a cambio de modificaciones en el proyecto del Ejecutivo por valor de 16 millones de euros.

La votación, muy celebrada por la presidenta de Navarra, María Chivite, y su equipo económico liderado por la consejera de Economía y Hacienda, Elma Saiz, dota de tranquilidad al Ejecutivo foral, que consigue superar el primer gran escollo de la legislatura: sacar los primeros presupuestos adelante con un Gobierno en minoría. El acuerdo alcanzado con EH Bildu hace unas semanas y formalizado hoy en el pleno del Parlamento supone comenzar el mandato con cierta estabilidad.

Pero el pleno ha dejado también otra imagen: un duro cruce de reproches con Navarra Suma, que ha criticado al PSN “haber aprobado unos presupuestos que antes rechazaban”  haciendo referencia a cuando el PSN votaba en contra de los presupuestos del cuatripartito –Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Iquierda-Ezquerra– la pasada legislatura. La portavoz María Jesús Valdemoros ha calificado las cuentas de ser “las de EH Bildu y Geroa Bai y no las del PSN” y ha afeado al Ejecutivo liderado por María Chivite de no haber negociado con ellos, a pesar de que se les citó a una reunión para iniciar una negociación a la que no llevaron ninguna propuesta.

Precisamente el portavoz del PSN, Ramón Alzorriz, ha criticado esa actitud de Navarra Suma de “no querer negociar”. “Se ha visto en este Parlamento donde ustedes han alcanzado posturas de continuo rechazo y enfrentamiento con el Gobierno”, ha apostillado. “Buscaron en Madrid lo que no encontraron aquí y crearon una imagen falsa de que querían negociar con nosotros cuando siempre han pensado más en su partido que en los navarros”, ha replicado Alzórriz.

Ramón Alzórriz se ha felicitado en nombre del PSN y del Gobierno “por haber sabido dialogar con diferentes y conseguir el mejor presupuesto posible”. Ha hecho especial hincapié en el incremento de 250 millones en el gasto social y ha dado un dato: “El 54% del gasto va a ir destinado a Sanidad y Educación”. 

Desde la bancada de EH Bildu –que ha seguido la línea del acuerdo firmado hace unas semanas con el Gobierno foral de facilitar la aprobación de las cuentas a cambio de 16 millones de euros en enmiendas– Adolfo Araiz también se ha felicitado por “sacar adelante unas cuentas que tienen una gran importancia política”. También ha agradecido al Gobierno por “haber sido capaz de negociar con EH Bildu”. “El Gobierno tenía dos opciones: mirar a la derecha a la izquierda, y ha terminado mirando a la izquierda”. 

El portavoz de EH Bildu ha aprovechado su intervención para mandar un mensaje en forma de advertencia al Gobierno de Navarra para que sean “que no tienen un cheque en blanco”. Aldolfo Araiz ha apuntillado que cualquier propuesta que el Ejecutivo lleve a la cámara deberá ser “debatida y negociada con nosotros si quieren que salga aprobada”, recalcando que su abstención en los presupuestos no significa un pacto para el resto de la legislatura.

También ha expresado su malestar a las cuentas la única parlamentaria de Izquierda-Ezquerra, formación que firmó el pacto de Gobierno, pero que finalmente no entró a formar parte del Ejecutivo. Marisa de Simón ha lamentado que los presupuestos “sean continuistas e insuficientes” y ha afeado al Gobierno “no haber sido valiente” al no haber incluido en las cuentas reformas de mayor calado como la propuesta de su partido de asumir una “gran reforma fiscal”. La portavoz de Izquierda-Ezquerra ha mostrado también su enfado porque no se ha aprobado ninguna de sus enmiendas parciales presentadas en comisión.

Finalmente, la formación de izquierdas se ha abstenido. Una decisión que escenifica la división interna de la coalición de izquierdas, ya que una de sus dos patas –Baztarre– quería votar a favor de las cuentas, y  que no ha afectado al resultado de la votación, ya que las siete abstenciones de EH Bildu y los votos favorables de los partidos que conforman el Gobierno (PSN, Geroa Bai y Podemos) han sido suficientes para sacar adelante la ley de presupuestos. Aun con todo esa diferencia de voto muestra un primer distanciamiento entre las fuerzas que firmaron el acuerdo de Gobierno, en este caso de una formación que se ha sentido “maltratada”.

En medio los otros socios de Gobierno, Geroa Bai y Podemos, que se han mantenido al margen del cruce de reproches y que se han limitado a celebrar la aprobación de “los presupuestos más expansivos y fruto de la pluralidad de formaciones”. Y en el caso de Geroa Bai, su portavoz Mikel Asiain, ha remarcado que “que sean unos presupuestos continuistas no es algo negativo sino algo positivo” y ha criticado a Navarra Suma de hacer un “populismo de titulares” por haber presentado enmiendas por valor de 280 millones “cuando propusieron una reforma fiscal que significaba una merma en las arcas públicas de 250 millones de euros”.

Incremento del techo de gasto de 4.500 millones de euros

Finalmente se han incorporado 269 enmiendas tras el debate en comisión y once in voce en el mismo pleno del Parlamento. El estado final de gastos e ingresos por lo tanto ha quedado fijado en 4.573.798.028 euros, lo que supone un incremento del techo de gasto de 16.739.530 euros, 5.470 euros por debajo del límite autorizado.

En el acuerdo con EH Bildu que hoy se ha formalizado se recogen medidas como la adelantada por este periódico de elaborar un estudio para implantar un complemento a las pensiones más bajas de los navarros a través de la Renta Garantizada, la ampliación de la plantilla de la Policía Foral para “garantizar la prestación de los servicios derivados de las transferencias de tráfico y seguridad vial” o el compromiso para impulsar un salario mínimo de 1.200 euros en Navarra.

También la creación de una partida “ampliable” de 10 euros para construir el Fondo Climático de Navarra. Dicho fondo debería servir para financiar medidas que tengan por objeto mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero y hacer frente a los impactos adversos sobre la salud y el medio ambiente que tienen esas emisiones. Además, el Gobierno de Navarra se compromete a presentar un Proyecto de Ley o hacer una modificación de los presupuestos para dotar al Fondo Climático con una partida en 2020 de al menos 300.000 euros. El acuerdo explicita que el fondo deberá funcionar “de forma transparente y con mecanismos claros de seguimiento, evaluación y destino de los fondos”.