Los Bomberos critican que en 2014 hubo 106 días con algún parque “bajo mínimos”
Los Bomberos de Navarra critican que falta personal, que la plantilla está envejecida y que se tira de traslados ante la escasez de efectivos. Y, para denunciarlo, la plantilla vuelve a poner sobre la mesa las cifras: en 2014, según los datos que manejan representantes de los trabajadores, hubo “177 días” en los que alguno de los doce parques navarros amaneció “bajo mínimos”, es decir, con una dotación de personal por debajo de la cifra establecida para ellos. A través de los traslados, un sistema que desde la Agencia Navarra de Emergencias (ANE) han defendido porque permite gestionar de forma más eficiente el personal, se acabó trasladando a 152 efectivos. Pero, con todo, desde la plantilla insisten en que el año se cerró con 106 jornadas en las que en al menos algún punto (en 27 de esos días, fue en más de un parque) no se ha cumplido con el mínimo exigible.
Desde la plantilla, insisten en que este balance con el que se ha cerrado 2014 demuestra que un acuerdo que se logró en su día para facilitar la movilidad, en principio con el objetivo de cubrir bajas puntuales, finalmente se ha convertido en un recurso habitual. Y eso, insisten estas fuentes, demuestra “el déficit de la plantilla”.
Los Bomberos ya trasladaron un avance de estos datos antes de que terminara el ejercicio al Parlamento de Navarra. En una reunión mantenida con PSN, Bildu, Aralar, PPN, Izquierda-Ezkerra y Geroa Bai, la Comisión de Personal (el órgano que agrupa a los sindicatos) denunció que se ha reducido la formación de 40 a 20 horas y que faltan efectivos. Entonces, se habló de 98 días del año con al menos uno de los parques bajo mínimos, pero se anticipó que la cifra sería mayor al finalizar el ejercicio. Ahora el balance definitivo habla de 106.
En concreto, lo habitual es que un parque cuente en Navarra con entre tres y cuatro bomberos (una cifra también cuestionada), pero cada uno tiene acordada una dotación: Cordovilla tendría que contar con once, Pamplona con seis, Tudela con cinco; Tafalla, Estella y Oronoz con cuatro; y, por último, Burguete, Navascués, Alsasua, Lodosa, Peralta y Sangüésa con tres. Sin embargo, al comprobarse a las ocho de la mañana cada servicio, la Administración puede decidir mover al personal, en virtud del acuerdo de movilidad antes mencionado. Así, en al menos 177 jornadas se detectó esta necesidad, se desplazó a un total de 152 personas y, finalmente, hubo 106 días en los que alguno de esos doce parques no cumplió los mínimos establecidos. Las mismas fuentes critican que la situación más “catastrófica” la ha afrontado el parque de Trinitarios, donde funcionaron al menos 85 días por debajo de las cifras fijadas.
El número de bomberos necesario
El gerente de la ANE, Eradio Ezpeleta, ha defendido con insistencia que el servicio es modélico y que en la actualidad Navarra cuenta con los efectivos suficientes: “Necesitaríamos 347 bomberos para cubrir las 52 plazas diarias que se necesitan, y creo que hay casi 20 más”. Ezpeleta ya ha argumentado que las críticas de la plantilla, al menos en este asunto, se deben a que estaba acostumbrada a trabajar con más personal, con mayor holgura, y que la movilidad es una forma más efectiva de gestionar la plantilla.
Fuentes de la plantilla, por el contrario, matizan que en esas cifras no se tienen en cuenta posibles bajas y que, si hay personal suficiente, no se entiende tanto movimiento entre parques. Además, critican que la plantilla sigue envejeciéndose: entre todos los parques, hay en la actualidad unas 15 personas mayores de 55 años formando parte del operativo y, que por edad, podrían pasar a la llamada segunda actividad (fundamentalmente, labores de mantenimiento), a las que a lo largo de este ejercicio pueden sumarse otras nueve personas que alcanzan esa edad. Ezpeleta ya admitió que esta situación obliga a contar con personal a corto plazo, pero desde la plantilla rechazan que estas necesidades puedan, por ejemplo, cubrirse con personal eventual o en formación. El problema, por tanto, es “grave” y “este año se agudiza bastante”, en su opinión por la falta de previsión de los responsables.