Educación avanza en el nuevo centro de Sarriguren, que se realizará por fases
El Departamento de Educación ya ha adjudicado la redacción del proyecto para la construcción del nuevo centro de educación infantil y primaria en Sarriguren. Se cumplen los plazos que permitirán que el curso 2015-2016 el centro cuente con 9 aulas más para acoger a los alumnos de infantil, aunque desde las asociaciones vinculadas con el centro consideran que no será suficiente ya que, según los datos de prematrículas de los últimos años, estarán llenas en febrero, antes de estar construidas.
Las obras están previstas para ser realizadas en tres fases. Durante la primera fase se construirán, para educación infantil, 9 aulas, un aula de psicomotricidad, 5 aseos con acceso directo desde las aulas, un aseo para profesores y un cuarto de limpieza. Unos servicios que no van a ser suficientes para reducir la saturación del centro, del que el año pasado salieron 35 alumnos que finalizaron la enseñanza primaria y entraron 239 nuevos estudiantes en los cursos de infantil. Respecto a la ocupación en las aulas estos datos implican que quedaron libres dos aulas de los alumnos que terminaron su estancia en el colegio, y fueron necesarias 9 aulas para acoger a los nuevos estudiantes.
Esta primera fase incluye también la construcción de un gimnasio para infantil y primaria, dos vestuarios, una sala de profesores, un despacho para dirección, una sala para la APYMA, tres despachos para logopedia y orientación y un puesto de conserje y fotocopias.
La demanda de la APYMA y la asociación ‘Hazi eta Hezi: construyendo Sarriguren’ es que el nuevo centro se construya entero para el próximo curso, y no sólo una primera fase que no servirá para aliviar la situación de saturación que vive el centro actual en el que en este curso recibirán clase 48 grupos de alumnos pese a estar autorizado para 45.
La realidad es que la redacción del proyecto que ya ha adjudicado el Departamento de Educación contempla las obras por fases y no se comenzará a construir la segunda fase, que incluye 18 nuevas aulas, hasta que no esté finalizada la primera, por lo que para el próximo curso los alumnos contarán solo con esas 9 aulas. La ejecución de las obras por fases aumenta la incertidumbre en los padres y asociaciones del barrio que desconfían de que el Gobierno realice todas las obras y termine de construir el centro completo.