Pamplona protesta contra las agresiones sexistas: “Queda trabajo por hacer”

“Ni una agresión sin respuesta”. Esta ha sido la consigna más repetida durante la masiva concentración que se ha celebrado esta tarde, a partir de las 20:00 horas, en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona, tras conocerse esta misma mañana que se ha registrado una denuncia por una presunta agresión sexual durante los sanfermines. Y, por esa respuesta, está claro que entre las y los asistentes ha calado la concienciación contra estos abusos, porque el público que ha llenado este punto de la capital navarra conocía pocos detalles sobre lo sucedido, pero se ha reunido en torno a ese mensaje contra los abusos, los comentarios, los manoseos que se pueden producir con la excusa de las fiestas y los excesos del alcohol.

“Esta es la realidad contra la que luchamos”. La técnica de Igualdad del Ayuntamiento de Pamplona, Pilar Mayo, se ha mostrado así de categórica al valorar la agresión sexual. El Consistorio ha puesto en marcha durante estas fiestas, por segundo año consecutivo, una campaña de concienciación precisamente contra las agresiones sexistas y, por ello, el suceso que se ha conocido ahora ha motivado numerosas reacciones de hartazgo: una chica de 19 años denunció ante la Policía Nacional cómo, mientras ella presuntamente mantenía relaciones consentidas con un chico en un baño de un local del Casco Viejo, durante la noche del 9 al 10 de julio, otros jóvenes accedieron al aseo semidesnudos, enseñando sus genitales. Ella entonces se asustó, les pidió que parasen (dijo stop), unos amigos acudieron a socorrerla y presentó una denuncia por lo sucedido. Este suceso no supone para Mayo un paso atrás en esta lucha contra las agresiones sexistas, sino una confirmación de que “queda trabajo por hacer”.

El caso mencionado ha sido desvelado por la Plataforma de Mujeres contra la Violencia Sexista y el colectivo Gora Iruñea!, que gestionan un número de teléfono (699 687 687) a través del que se pueden exponer casos de agresiones sexistas (además de en el puesto de información habilitado durante las fiestas en la céntrica plaza del Castillo). Zuriñe Altable, integrante de la plataforma, ha explicado que a través del teléfono se conoció cómo una chica había denunciado este caso, aunque su versión difiere de la precisada por la Policía Nacional: ante estas asociaciones de mujeres, la denunciante aseguró que ella se dirigió al baño cuando fue asaltada y sufrió un intento de violación. El caso sigue siendo investigado.

Fuentes policiales explican que, por el momento, se continúa tomando declaraciones por esta denuncia y, después, los resultados se remitirán a la autoridad judicial. Desde los colectivos convocantes de la protesta han afirmado, en general, que hay que frenar esa sensación de que en sanfermines todo vale y han recordado que cuando una mujer dice no es no, independientemente de las condiciones en las que esté y en qué situación sea.

Desde el colectivo Lunes Lilas, conocido porque también pidió que durante las fiestas se iluminara la fachada de la Casa Consistorial de morado (durante la noche del 7 de julio), en recuerdo de Nagore Laffage, a la que mató José Diego Yllanes durante los sanfermines de 2008, han destacado a través de un comunicado precisamente la intervención de esos dos amigos, que lograron entrar al baño y que en su opinión demuestra la concienciación contra este tipo de agresiones. Su portavoz, la parlamentaria de Podemos Tere Sáez, ha afirmado en la concentración que “la gente está respondiendo y hemos dado un gran paso. Esto era impensable hace diez años. Puede haber más casos, pero lo importante es que ocurra esto”, en referencia a la concentración de condena.

Otras agresiones más leves

Desde la Policía Municipal de Pamplona, por su parte, han adelantado que tienen constancia de más agresiones sexistas, de menor intensidad que la mencionada, durante las fiestas. Con todo, fuentes del Cuerpo han valorado que las campañas de sensibilización están surtiendo efecto, aunque el objetivo tenga que ser a más largo plazo, y han valorado por ejemplo como un paso adelante que hubiera menos imágenes de este tipo durante el inicio de las fiestas, motivo por el que en realidad desde el Ayuntamiento se puso en marcha esta campaña contra las agresiones sexistas. Este año, incluso ha habido un dispositivo de vigilancia especial para atajar estas situaciones durante el Chupinazo.

Desde los colectivos sociales y el propio Ayuntamiento (la Junta de Gobierno también ha participado en la concentración y el alcalde, Joseba Asiron, en declaraciones a Cadena Ser Navarra, ha pedido “tolerancia cero” a estas agresiones) han insistido en la necesidad de que la ciudadanía se implique para combatir estas agresiones, y también otras más leves, como manoseos y ciertos comentarios, porque “eso también son agresiones, aunque de menor intensidad, y se pueden denunciar”, ha insistido Altable.

Desde las Juventudes Socialistas, por su parte, también se han sumado a la condena de estos actos (al igual que la ONG Médicos del Mundo, el sindicato LAB o las peñas de Pamplona, entre otros colectivos) y han pedido que las medidas para evitar este tipo de sucesos arranquen desde los centros educativos. Este, de hecho, es el compromiso del Ayuntamiento de Pamplona que, según apunta Mayo, pretende mantener las reuniones de la plataforma Sanfermines en Igualdad, que quiere llegar a los colegios para implicar a las nuevas generaciones, además de trabajar para lograr unos espacios festivos seguros y unas fiestas en igualdad.

(Edición actualizada).