¿Cuántas vacantes están sin cubrir en el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea? Esta es la pregunta que lanzan desde ELA, y esta vez la dirigen a los partidos que pueden apoyar un nuevo Gobierno Foral, alternativo a UPN. El sindicato abertzale critica la falta de información sobre este tema que ha caracterizado a la última legislatura y, por ello, pide a las cuatro formaciones que apuestan por el cambio en el Ejecutivo que pongan negro sobre blanco en los puestos disponibles en Osasunbidea y cuál es el nivel de personal contratado (y que, por tanto, no es funcionario fijo, un porcentaje que creen que ha aumentado de forma considerable). Estos pasos son necesarios para la segunda petición: que se actualice la Oferta Pública de Empleo que UPN anunció al final de la legislatura y con las elecciones forales ya a la vuelta de la esquina.
Diversas centrales (y de diferente signo, desde Afapna a CCOO, LAB o la propia ELA) criticaron que la formación regionalista recurriera a las promesas en empleo público tras más de cinco años sin novedades (salvo una convocatoria en Enfermería, que se publicó un día antes de que el Gobierno Foral anunciara que congelaba esta vía). Sin embargo, precisamente la primera promesa electoral del candidato de UPN a la Presidencia del Gobierno Foral, Javier Esparza, fue en este sentido, en este caso en Educación (900 plazas en cuatro años), un anuncio que tuvo respuesta por parte de sindicatos y de la oposición, que criticaron que se jugara con el empleo público. Desde el Ejecutivo foral alegaron entonces que el Gobierno central (y su tasa de reposición del 10%; es decir, que de 100 plazas libres solo se contrataban 10) por fin había dado facilidades para retomar estas ofertas (y aumentar la tasa al 50% en algunas categorías).
La polémica aumentó al extenderse a otras áreas (como Sanidad o Bomberos) y, por fin, el Ejecutivo concretó la Oferta Pública de Empleo a dos meses de la cita electoral: 358 plazas. Entre ellas, se incluían 209 en Salud, 134 en Educación, 10 en Bomberos, 5 para personas con discapacidad intelectual. Del total de plazas, la mayoría (269) correspondía a la OPE acumulada entre los años 2013 y 2015, y otras 89 a la OPE de 2009 que se suspendió en 2011. En cuanto a la Sanidad, el Gobierno ya precisó entonces que había 69 de Auxiliar de Enfermería, 57 plazas de Medicina, 56 de Enfermería, 13 de Técnico de Radiodiagnóstico, 7 de Trabajo Social y otras tantas matronas.
Y los sindicatos criticaron que la OPE, una previsión para en el futuro convocar oposiciones, se quedaba muy corta. En palabras de la delegada de ELA en el Complejo Hospitalario de Navarra, Arantxa Elgoibar, es “una miseria”. El sindicato, a través de un comunicado, ya ha denunciado esta misma semana que la oferta se centra sobre todo en áreas de Medicina y Enfermería, y la oferta de auxiliares parece “una falta de respeto”. Además, Elgoibar cree que es necesario realizar una radiografía de las vacantes disponibles en Osasunbidea, porque calculan que “hay más del 50% del personal contratado de forma precaria” (hablan de vacantes que no se cubren y un uso creciente de plazas estructurales, surgidas por necesidad pero sin personal fijo) y denuncian que el Gobierno Foral no les facilita esa información.
Nuevos pasos
Por ello, apuestan por una alternativa y piden a las fuerzas que ahora negocian un gobierno de cambio que tengan en cuenta actualizar la OPE y anunciada por UPN. No en vano, es ahora cuando han arrancado las comisiones por áreas en las negociaciones entre Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra y, por ello, los sindicatos ya han lanzado un aviso para navegantes sobre las necesidades de empleo público. LAB, por ejemplo, aseguró poco después de conocerse el resutlado electoral que, además de medidas urgentes como revisar los contratos de las cocinas hospitalarias o del laboratorio unificado, también es necesario actualizar la OPE, que falta personal y que hay que replantearse la estructura asistencial.
En el borrador facilitado por Geroa Bai al resto de los grupos para intentar acordar un acuerdo programático, se incluía realizar un “diagnóstico” de la prestación del servicio público sanitario en función del territorio y, también, otro sobre las posibilidades de reparto de trabajo de la Administración. Ese borrador, no obstante, fue criticado por Podemos y EH Bildu echó en falta abiertamente diversas de sus propuestas. Desde ELA esperan ahora nuevos pasos y que haya un compromiso concreto de revisar la OPE, para completar las vacantes existentes y evitar, según apunta Elgoibar, que se juegue con las expectativas de personas que llevan mucho tiempo esperando unas oposiciones.