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Sindicatos y oposición critican que la reforma fiscal va “en dirección opuesta” a las necesidades navarras

Una reforma fiscal “en dirección opuesta” a lo que necesita Navarra, “un fiasco”, una propuesta que beneficia a los que más tienen. Esta fue la primera valoración que, desde sindicatos y oposición, realizaron ayer de la reforma fiscal propuesta por el Gobierno de Navarra. Pese a que la consejera de Economía, la regionalista Lourdes Goicoechea, defendió al progresividad de la propuesta, el avance con respecto a Madrid que supone mantener la deducción por vivienda, o la sencillez que supone contar con un tipo general para todas las empresas en el Impuesto de Sociedades del 20%, estas explicaciones no contentaron a estos colectivos, que dieron una visión completamente diferente. Incluso, opuesta.

“La reforma fiscal supone reducir en 75 millones los ingresos, rebajando los impuestos a las rentas más altas y a las empresas, lo que se traducirá en recortes”, auguraron desde el sindicato ELA. Por ello, desde CCOO consideraron también que esta propuesta va “en dirección contraria a lo que necesita esta comunidad”. “Incurre en los mismos errores que la presentada hace unos días por el Gobierno central”, precisaron a través de un comunicado. Desde LAB se pronunciaron de forma similar, al recordar que la propuesta de UPN resulta “especialmente generosa para los tramos de renta más elevados, la reducción de la imposición a las rentas del capital y a los grandes patrimonios, y el establecimiento del tipo nominal más reducido de todo el Estado en el Impuesto de Sociedades”.

Precisamente ese tipo único del 20% para todas las empresas fue uno de los puntos fuertes destacados por Goicoechea ante los medios de comunicación durante la presentación de este tipo de medidas. Esta reforma fiscal llega apenas unos días después de que el Gobierno central presentara la suya y desde el Ejecutivo navarro ya habían adelantado que los navarros no estarían en peores condiciones en materia fiscal que en otras zonas del país. Y, así, su propuesta plantea una reducción en todos los tramos (se mantienen todos) del IRPF para 2015 y 2016, se reducen los impuestos a ahorradores, se mantienen sin cambios las indemnizaciones por despido y siguen, también, las deducciones por vivienda o alquiler.

Goicoechea también defendió que esta propuesta está abierta a las aportaciones de los grupos, y de ahí que no se haya presentado como un proyecto de ley. Sin embargo, durante la presentación de esta batería de medidas durante la tarde del miércoles a los grupos parlamentarios, estos precisamente criticaron este modelo. “Aquí han venido sin plan ni proyecto de ley, que es lo que exige esta Cámara, por eso esto es una tomadura de pelo”, apuntó el portavoz del PSN, Juan José Lizarbe. “Es un fiasco”, sentenció el representante de Bildu Maiorga Ramírez.

Pero los grupos no solo criticaron las formas sino también el fondo de estas medidas. Esta misma semana, la Plataforma de Entidades Sociales de Navarra ya temió que la reforma fiscal de la comunidad fuera continuista con la presentada en Madrid y, por tanto, se perdiera una oportunidad para corregir las desigualdades sociales.

La primera valoración del Parlamento

Ayer, los grupos se manifestaron de la misma forma. El PSN aseguró que no se bajan los impuestos a todos y que no hay medidas para reactivar la economía, como se había anunciado; Bildu, por su parte, criticó que estas medidas benefician a quienes están en mejor disposición para hacer frente a la crisis, y lamentó que no se pusieran ejemplos de cómo afectarán estas reducciones a las rentas más altas. Desde Aralar-NaBai, Juan Carlos Longás apuntó que “de forma genérica es difícil no estar de acuerdo con los pilares anunciados, pero ¿qué entendemos por equidad? Seguro que es diferente”. Así, el portavoz de Izquierda-Ezkerra, José Miguel Nuin, también mostró su preocupación por el descenso de ingresos que supondría llevar a cabo esta propuesta: “No van en la dirección correcta”. Y, en este sentido, el parlamentario Manu Ayerdi defendió que no parece el momento para reducir a esos 75 millones de recaudación.

Solo PP y UPN se mostraron de acuerdo con las medidas. Los primeros, al defender que “nos gusta la propuesta en todos sus impuestos”; los segundos, porque ha quedado demostrado que la medida navarra “es diferente de la de Madrid”. Con todo, la consejera de Economía ya recordó que esta era la primera sesión para buscar los acuerdos necesarios que hagan realidad una propuesta, por ahora, sugerida pero no aprobada.