“No solo están gastando más en privatizaciones, sino que además lo están haciendo sin control”. En su particular tono beligerante, el portavoz parlamentario de UPN en cuestiones de Salud, Sergio Sayas, ha acusado hoy al Gobierno cuatripartito de mantener un “desvío de gasto” de 8,2 millones de euros, cuatro millones más de lo gastado el año pasado, en prestaciones y conciertos en materia de Salud. “Es decir, en privatizaciones”, ha resumido Sayas. A su juicio, este incremento del gasto demuestra la “incoherencia” del Gobierno, que critica las privatizaciones al tiempo que las incrementa.
Sergio Sayas ha ahondado en sus críticas: “No solo están gastando más en privatizaciones, sino que lo están haciendo sin control, con menos garantías jurídicas, a precios más altos y sin que se pueda acceder a la libre concurrencia para prestar servicios”, ha detallado el portavoz regionalista.
El consejero de Salud, Fernando Domínguez, ha vuelto a tirar de datos para responder al portavoz de UPN. Así, le ha explicado que sus críticas se basan en meras proyecciones, unas previsiones que se corrigen mes a mes conforme avanza el ejercicio presupuestario, y que los datos a los que alude el regionalista no son un diagnóstico fiel de la situación actual de los conciertos o privatizaciones, ya que no tienen en cuenta “servicios internalizados que tendrán su correspondiente reflejo en la facturación a final de año”.
Domínguez ha intentado ser didáctico con Sayas y le ha citado como ejemplos los servicios de densiometrías óseas o el seguimiento a los pacientes de transplante renal, dos servicios que han dejado de prestarse en centros concertados para ejercerse desde el sistema público. “Un equipo de densiometría ósea cuesta 68.000 euros. Durante años ha sido reclamado por parte del personal sanitario público para poder prestar este servicio sin tener que recurrir a un concierto. Pero sólo han podido contar con él desde hace unos meses. Haga usted las cuentas, el gasto de conciertos asciende a 2,2 millones, una cantidad que ahora podemos ahorrar”, ha indicado el consejero al portavoz regionalista.
Además, ha querido puntualizar que de los 8,2 millones que Sayas ha considerado un “desvío”, un total de 1,6 millones corresponden a facturas del año anterior que, por cuestiones administrativas, no pudieron incluirse en el pasado ejercicio. El consejero ha considerado “escandaloso” que Sayas reproche ahora al Gobierno del cuatripartito los conciertos en materia de salud, “cuando si por algo ha destacado UPN en el Gobierno es por sus privatizaciones y por sus recortes”.