En los últimos años, el panorama de tolerancia hacia las pseudoterapias ha cambiado drásticamente. De un ambiente general de permisividad con las medicinas alternativas, se ha pasado a una repulsa general a las pseudoterapias. Así, múltiples universidades han retirado estudios de estas disciplinas no sujetas a las evidencias científicas, la Organización Médica Colegial (OMC) ha criticado con dureza estas prácticas y los ministerios de Ciencia y Sanidad del actual Gobierno han desarrollado un plan contra las pseudoterapias que fue aprobado en el Consejo de Ministros en noviembre de 2018. Además, los medios de comunicación se muestran más críticos que nunca con estas disciplinas, así como también diferentes colectivos médicos y farmacéuticos que han difundido escritos informando y alertando sobre estas prácticas sanitarias.
De cara a la galería, los colegios de médicos también se suman a esta tendencia crítica contra las pseudoterapias. De hecho, hace apenas un mes, el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España (el CGCOM) firmaba la declaración de Madrid, por la cual recomiendan que sean “expresamente prohibidas y excluidas de cualquier circuito sanitario” y se reconozcan “como prácticas que atentan contra la salud pública”. Sin embargo, la realidad en el interior de los Colegios Oficiales de Médicos es muy diferente. Todos ellos acogen, en mayor o menor medida, a médicos pseudoterapeutas colegiados. Aún a pesar de que exista información pública que demuestra que estos médicos realizan prácticas sanitarias sin evidencia demostrada, incumpliendo así varios puntos del código deontológico médico (las normas que velan por el correcto ejercicio de la medicina) y poniendo en riesgo la salud y la vida de sus pacientes.
La teórica labor de los Colegios de Médicos
En teoría, entre las múltiples funciones de los Colegios de Médicos se encuentran vigilar el cumplimiento de las normas deontológicas por parte de sus colegiados (sancionando cuando se vulneran) y velar por una publicidad correcta con base científica contrastada. En ese sentido, el código deontológico médico en España es muy claro con respecto a las pseudoterapias en su artículo 26:
“1.- El médico debe emplear preferentemente procedimientos y prescribir fármacos cuya eficacia se haya demostrado científicamente.
2.â No son éticas las prácticas inspiradas en el charlatanismo, las carentes de base científica y que prometen a los enfermos la curación, los procedimientos ilusorios o insuficientemente probados que se proponen como eficaces, la simulación de tratamientos médicos o intervenciones quirúrgicas y el uso de productos de composición no conocida“.
La realidad de los Colegios de Médicos
A pesar de la claridad del código deontológico, existen en la actualidad centenares de médicos que practican pseudoterapias y que están amparados por los Colegios de Médicos de toda España. De hecho, es extraordinariamente raro que un pseudoterapeuta reciba sanción alguna por parte de un Colegio Médico por esta razón. El año pasado, el equipo de Redacción Médica realizó una extensa investigación al respecto y comprobó que solo 6 de los 52 Colegios han expedientado alguna vez a pseudoterapeutas. Además, el número de sanciones (que van desde lo económico hasta la inhabilitación para ejercer la Medicina) es muy reducido para el número de pseudoterapeutas que se encuentran entre sus filas.
La situación del Colegio de Médicos de Valencia
Solo en el Colegio Oficial de Médicos de Valencia (ICOMV), la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (APETP) ha documentado con pruebas la existencia de más de 50 médicos que realizan prácticas médicas carentes de base científica. Estas prácticas son muy variadas y van desde la homeopatía o la acupuntura hasta la hidroterapia de colón, el biomagnetismo, la terapia cuántica, la bioenergética o la bioneuroemoción. Además, algunos de estos médicos ejercían en centros que carecían de registro sanitario.
El ICOMV conoce perfectamente esta situación. APETP envió a este Colegio en repetidas ocasiones informes alertando sobre estos pseudoterapeutas y exigiendo una respuesta acorde a las funciones de un Colegio de Médicos. ¿La respuesta del ICOMV? En una carta enviada en 2017 a dicha asociación afirmaban que “[...] no encontramos falta alguna al Código Deontológico. [...] En cuanto a la contestación a la postura del Colegio sobre la validez científica de la homeopatía y otras terapias, como ya hemos informado en repetidas ocasiones, entendemos que la debe estipular la Universidad o el Estado, en ningún caso la puede establecer el ICOMV, porque no tiene medios, ni recursos dedicados a la investigación médica, ni competencia para legislar sobre el uso de medicamentos o técnicas”. Al preguntar al ICOMV hace unos días sobre su postura oficial actual sobre los pseudoterapeutas, remiten a la contestación dada en dicha carta.
Para el ICOMV, que sus miembros colegiados hagan declaraciones públicas como recomendar homeopatía como primera opción para enfermedades como la otitis o recomendar inyecciones de ozono por vía anal para el tratamiento de un paciente diagnosticado de VIH no son faltas del Código Deontológico. Debe ser difícil emitir un juicio así, cuando entre los médicos que realizan estas prácticas, uno se encuentra en la Junta Directiva y existe una sección colegial de Medicina Integrativa formada por acupuntores, homeópatas y naturistas. El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España (CGCOM) sí observó infracciones del Código Deontológico cuando recibió el mismo informe elaborado por APETP. Sin embargo, ese Consejo no dispone de las competencias para sancionar a los médicos, tarea que recae en los Colegios Oficiales, por lo que dicha declaración es un brindis al sol.
La situación del Colegio de Médicos de Madrid
La situación del ICOMV no es, ni mucho menos aislada. Hace alrededor de medio año, APETP envió un informe al Colegio de Médicos de Madrid sobre pseudoterapeutas en sus filas con pruebas públicas. En dicho informe se recogen y demuestran seis casos de graves infracciones del Código Deontológico. Son médicos que practican la Nueva Medicina Germánica, la homeopatía, la acupuntura, la sintergética o medicina del alma, la dianética (pseudoterapia que pertenece a la secta de la Cienciología), el biomagnetismo, la hidroterapia de colón, la ozonoterapia... En dicho documento se puede acceder a declaraciones de estos médicos que son claras infracciones. Así, un médico afirma que el biomagnetismo tiene utilidad para tratar el Parkinson y otro médico explica que “lo que nos enferma es la conciencia, y que se puede sanar a partir de la conciencia”. Incluso en un vídeo emitido por Antena 3 un médico colegiado recomienda un jarabe que “cura” el cáncer a 95 € el frasco.
Ha pasado alrededor de medio año y el Colegio de Médicos de Madrid no se ha pronunciado al respecto. Al preguntar al dicho Colegio por su postura sobre el informe por diferentes vías (teléfono/correo electrónico) no ha sido posible recibir respuesta alguna.
Estos informes detallados de APETP solo muestran la punta del iceberg del total de pseudoterapeutas colegiados en España. Por mucho que públicamente se critiquen estas prácticas sanitarias carentes de evidencia científica, lo cierto es que quienes son responsables de vigilar y sancionar, los Colegios de Médicos, no están cumpliendo con sus funciones para velar por la salud y la vida de los pacientes.
Para saber más:
Médicos colegiados en el Colegio Oficial de Médicos de Valencia que imparten pseudoterapias