A Mariano Rajoy se le ha ido el pie con el acelerador en su intención de demostrar seguridad ante el tribunal que juzga la corrupción de Gürtel. El presidente del Gobierno no se ha cortado a la hora de calificar algunas de las preguntas que le han dirigido los abogados: “No parece un razonamiento muy brillante”, le espetó al representante de la acusación popular de ADADE, Mariano Benítez de Lugo.
Ante otra pregunta del abogado de ADADE, Rajoy terció: “Me parece que se ha equivocado usted de testigo”. El letrado se quejaba al tribunal: “Me parece impertinente su respuesta, creo que confunde su papel aquí”. La tensión llegó al punto de que hasta el presidente del tribunal decidió llamar al orden a Rajoy para que dejara de faltar al respeto de los letrados. Sin embargo, el presidente del Gobierno siguió como si nada.
En otro momento de la declaración, Benítez de Lugo preguntó a Rajoy sobre el viaje de lujo a Canarias que la trama Gürtel le pagó tras la derrota electoral de 2004. Lo que vino después parecía llevar la firma de un humorista:
ABOGADO: “¿Quién pagó su viaje a Canarias?”
RAJOY: “Lo pagó mi partido hasta donde yo sepa”
ABOGADO: “¿Y hasta dónde sabe usted?”
RAJOY: “Hasta el final”
ABOGADO: “Me parece la suya una respuesta gallega”
RAJOY: “Mi contestación tiene que ser gallega porque yo no podría darle una respuesta riojana”
Las bravuconadas de Rajoy no acabarían ahí. Durante el turno de Wifredo Jurado, abogado del PSOE madrileño, Rajoy volvió a buscar el cuerpo a cuerpo. El letrado preguntaba por la frase que Rajoy dirigió vía SMS a Luis Bárcenas y el presidente contestaba: “Hacemos lo que podemos significa exactamente que hacemos lo que podemos”. “Hasta ahí llego”, respondió el letrado a lo que Rajoy apuntaló: “Eso es opinable”.