Los últimos datos de la EPA, la única encuesta homologada en Europa para saber cuantos parados hay en España, nos dicen que se han destruido en el último trimestre 184.600 puestos de trabajo, que estamos en una tasa de paro del 25,9 por ciento y que aumenta el número de familias españolas en las que todos sus miembros están en paro, 53.100 más en este primer trimestre de 2014.
Estamos en la devastadora, insoportable e inmoral cifra de 5.933.300 españoles en paro.
Se tomen por donde se tomen, todos los datos resultan desoladores: disminuye la población activa, cae el empleo en los servicios, en la construcción, en la industria (42.000 empleos menos).
Hay un paro cronificado, aumentan los parados de larga duración y es evidente que los inmigrantes han vuelto a sus países de origen, que los jóvenes españoles se han ido del país, y no por voluntad aventurera, y que hay muchos españoles que han dejado de buscar trabajo y se han quitado de un mercado que siempre les dice no.
Ante esto, Rajoy afirma que no llueve, que esta muy contento, que las cosas van bien, que irán mejor y que esto es ya un no parar.
Antes de esto, han arreciado los mensajes desde el Gobierno del PP, y sus mariachis, que nos dicen que todo va sobre ruedas, que somos el asombro del mundo, que remontamos a pasos agigantados…
La propaganda, aunque sea mentirosa, puede ser eficaz cuando los lemas enlazan en parte con la situación de la gente, pero cuando hay semejante abismo entre lo que se dice desde el gobierno y la realidad evidente que sufren cada día millones de españoles, los mensajes falsos irritan doblemente a los ciudadanos.
¡Hay dos millones de hogares sin ingresos! Se han perdido 195.800 empleos en el sector privado y la catarata de cifras de la EPA confirma hasta la náusea que las facilidades para despedir se han traducido en eso, en que hay más despedidos, que no hay nuevos contratados, que cae la población activa.
Es igual, el Gobierno dice que vamos sobre ruedas y los ciudadanos parecen resignados a que, pase lo que pase, no acabe pasando nada.