La Audiencia Nacional acredita la caja B del PP: los empresarios donaban a cambio de “favores”
El tribunal que ha juzgado la primera época del caso Gürtel da por probada la existencia de una caja B en el PP, de una contabilidad “paralela” nutrida a base de donaciones finalistas y que servía para pagar actos electorales. Los jueces condenan al extesorero del partido Luis Bárcenas por llevarse parte de esos fondos en negro, aunque el PP renunció a reclamarle las cantidades que se llevó.
La sentencia desacredita el testimonio del propio Mariano Rajoy, que declaró que nunca conoció las existencia de los papeles de Bárcenas y que no cobró sobresueldos. No le creen la Fiscalía ni el tribunal. Si lo hubiese admitido, dice la sentencia, habría admitido “la percepción de pagos opacos para la Hacienda Pública”. Si bien esto no constituye un delito sí merece “un reproche social”, además de admitir la existencia de la caja B.
Hasta ahora los jueces instructores y la Fiscalía Anticorrupción habían dado por cierta la caja B, pero ahora es una sentencia la que señala que el PP nutrió una contabilidad opaca con fondos procedentes de la corrupción. Según el fallo, parte del dinero que movió la trama Gürtel sirvieron directamente para pagar gastos electorales del PP o fueron a parar como donaciones finalistas a “la llamada caja B del partido”.
Esa caja B consistía en “en una estructura financiera y contable paralela a la oficial existente al menos desde el año 1989”. La contabilidad se llevaba “informalmente, en ocasiones en simples hojas manuscritas como las correspondientes al acusado Bárcenas, en las que se hacían constar ingresos y gastos del partido o en otros casos cantidades entregadas a personas miembros relevantes del partido, si bien estos últimos aspectos que se describen lo son únicamente para precisar el contexto en el que se imbrican los hechos objeto de este enjuiciamiento, pero quedando fuera de su ámbito de conocimiento”.
Las donaciones no eran “altruistas”
Los jueces rechazan de plano que las donaciones que nutrieron la caja B sean “altruistas”. El dinero que aportaban los empresarios “tienen un marcado carácter finalista, en tanto en cuanto es una manera de pagar favores, o la contrapartida, por adjudicaciones irregulares de contratos”. Los magistrados, eso sí, dejan claro que la caja B se juzga en otro procedimiento de la Audiencia Nacional, pero que para sustentar su condena era necesario acreditarla.
Además de que el propio Bárcenas admitiese la existencia de la caja B, los jueces señalan que existe “prueba documental”. “Existen unas anotaciones de Bárcenas en las que se reflejan unos ingresos en determinadas fechas, y esos mismos ingresos aparecen en las mismas fechas y mismos importes en la cuenta de donativos del PP, como ingresados en esa cuenta”, explican.
Los jueces señalan que hay testimonios que niegan la caja B, pero les resta veracidad. Señala así las declaraciones como testigos de Javier Arenas, Francisco Álvarez Cascos, Pío García Escudero o el propio Rajoy. La Fiscalía argumenta, y comparte el tribunal, que no podían admitir que recibieron sobresueldos por las consecuencias que eso implicaría.
“Significaría reconocer haber recibido estas cantidades, en cuanto que supondría reconocer la percepción de pagos opacos para la Hacienda Pública, que si bien entiende que no son delictivos, pudieran ser considerados por los testigos como merecedores de un reproche social, como también que en caso de reconocer estas percepciones vendrían a admitir la existencia de una caja B en el seno de una formación política a la que pertenecen o han pertenecido”, señala la sentencia.
“Se pone en cuestión la credibilidad de estos testigos, cuyo testimonio no aparece como suficiente verosímil para rebatir la contundente prueba existente sobre la Caja B del partido”, añade el tribunal.
Bárcenas se llevó dinero de a caja B
El propio Luis Bárcenas habló en el juicio de una “contabilidad extracontable” que comenzó con su antecesor en la Tesorería del PP, Álvaro Lapuerta. Ambos manejaron durante años unas cuentas en negro que se destaparon con la publicación de los denominados 'papeles de Bárcenas', unos apuntes contables que recogen cómo se utilizaba ese dinero para retribuir a espaldas de Hacienda a los altos cargos del PP.
Así, entre la lista de quienes recibieron esos sobresueldos figuran Mariano Rajoy, Javier Arenas, Ángel Acebes o Rodrigo Rato. Todos tuvieron que comparecer en el juicio como testigos y todos lo negaron. Según se desprende de la contabilidad del extesorero, ellos y otros cargos orgánicos recibían cantidades que oscilaban entre los 5.000 y los 15.000 euros. Las entregas eran mensuales y a través de sobres.
Según la sentencia, Bárcenas se reservó parte de esos fondos para sí mismo. El extesorero del PP argumentó durante el juicio que su enorme fortuna escondida en paraísos fiscales provenía de negocio lícitos como la compraventa de obras de arte. Sin embargo, los jueces no se creen esa versión y sostienen que Bárcenas se llevó fondos de la caja B, aunque apuntan a que el PP ha renunciado a reclamar la devolución de esas cantidades.
“Por ser de interés para acreditar la existencia de dicha apropiación -indebida-, hay que partir de la base de que las cantidades existían, y, como las mismas se detraían de un determinado fondo o caja, acreditar que esta también existía”, señala la sentencia. “La caja o bolsa de la que se apodera del dinero Bárcenas, es algo que queda debidamente acreditado”, concluyen.