Círculo Balear: la asociación de extrema derecha que está detrás de la querella contra Valtonyc

La condena de tres años y medio para el rapero Valtonyc ha generado un gran eco mediático, político y social. La sentencia, emitida por la Audiencia Nacional y ratificada por el Tribunal Supremo, surgió de una denuncia interpuesta por Jorge Campos, presidente de la antigua Fundación Círculo Balear (FNCB), una asociación de extrema derecha con casi dos décadas de historia en las islas.

En una canción, titulada “Circo Balear”, Valtonyc dedicó esta frase al presidente de Círculo Balear: “Jorge Campos merece una bomba de destrucción nuclear”. Además, cantó otros versos en los que manifestaba su animadversión hacia la entidad, y colgó el videoclip de la canción con una foto de Campos. Por ello, el Supremo le ha condenado por un delito de amenazas no condicionales que, en el cómputo total de la condena, supone un total de 6 meses -el resto de la pena la componen el delito de enaltecimiento del terrorismo y el de calumnias e injurias graves a la Corona, que fueron denunciados por la Policía y el Ministerio Fiscal después de la querella de Campos.

Pero, ¿quién es Jorge Campos? Este político es conocido en Baleares por su particular “lucha” contra lo que él denomina el “pancatalanismo” y el “nacionalismo” de los Ejecutivos autonómicos, especialmente el actual, presidido por la socialista Francina Armengol. A ella le acusa de intentar “catalanizar” las islas por sus políticas lingüísticas y culturales, por ejemplo, por intentar introducir el catalán como requisito para trabajar en la sanidad balear.

Incluso, Campos cree que el PP es responsable del “grave problema del nacionalismo pancatalanista”. En una entrevista en El Mundo, dijo que esta situación es culpa de los populares por las leyes que han aprobado. Pone su punto de mira, entre otras normativas, en la Ley de Normalización Lingüística. Para él, el balear constituye un idioma propio, a pesar de que los estudios lingüísticos serios demuestran que es un dialecto del catalán.

Campos critica las normativas que fomentan la “represión” hacia la lengua castellana y denuncia la existencia de un supuesto “procés” en las islas. “Frenar el procés requiere unas reformas importantes, como devolver al Estado algunas competencias”, comentó a El Español. Preguntado por las acusaciones que recibe de ser populista o de extrema derecha, contesta: “Que digan lo que quieran”.

Círculo Balear: a favor de un monolito franquista

Las sombras sobre Círculo Balear vienen de lejos. Por ejemplo, Campos defiende la conservación del monumento franquista más importante de las islas: el dedicado al Crucero Baleares y conocido popularmente como 'Sa Feixina'. El propio Francisco Franco acudió en 1947 a la inauguración de este monolito, que fue levantado gracias a las donaciones forzosas de los ciudadanos, entre ellos los presos de Ca'n Mir, encarcelados por los fascistas. 

La fundación de Campos formaba parte de una plataforma a favor de dicha construcción y denunció al Ayuntamiento de Palma ante la Fiscalía al detectar “múltiples irregularidades” en el procedimiento de demolición del monumento.

Tanto Círculo Balear como Campos han acudido a manifestaciones para que no se derribe el monolito. En una de estas convocatorias, organizada por Hazte Oír en homenaje a “los caídos por España”, varios manifestantes ondearon banderas falangistas. También hubo gritos de “independentistas, a la fosa” y puñetazos a una persona que llevaba una bandera republicana.

Circulo Balear apoyó esta manifestación y, según Diario de Mallorca, Campos responsabilizó de estos incidentes “protagonizados por elementos de extrema izquierda” a “los integrantes del gobierno tripartito PSOE, Podemos y Més”, que según él estaban “reabriendo viejas heridas y conflictos ya superados”.

Reconversión en Actúa Baleares

La asociación de Campos se ha reconvertido recientemente en un nuevo partido político, Actúa Baleares, que conserva el ideario y el líder anteriores. El propósito de Actúa, que está pendiente de una posible querella porque su nombre coincide con el de la plataforma de Baltasar Garzón, es presentarse a las elecciones autonómicas y municipales de 2019. 

El partido, además de luchar contra el “pancatalanismo”, propone bajadas de impuestos o una mayor actuación contra “la inmigración ilegal”. En su web defiende que haya “una inmigración controlada en función de las necesidades de la economía nacional y de la capacidad de integrarse en la sociedad respetando nuestros valores”. Para ello, propone “cerrar mezquitas fundamentalistas e instalar a un mayor control de nuestras fronteras”.

Mos Movem: para “frenar el independentismo”

Pero Actúa Balerares y Jorge Campos no están solos: también ha cogido fuerza el movimiento ciudadano Mos Movem, que aunque en su seno agrupa a profesionales sanitarios y a miembros del sindicato médico, está formado también por colectivos anticatalanistas. La propia persona que está al frente, Úrsula Mascaró, aseguró en El Mundo que el objetivo que se marcan es “frenar el independentismo incipiente” en Baleares. 

Mos Movem forma parte, como Círculo Balear, de una corriente de opinión que afirma la existencia de un supuesto “idioma balear”. El movimiento se apoya en las tesis defendidas por la Fundació Jaume III, de la cual es el vídeo que Mos Movem ha compartido en su cuenta de Twitter, en el que aparecen unos niños “corrigiendo” un texto escrito en catalán estándar. 

La empresaria Mascaró, además de advertir sobre la “deriva catalanista” del Ejecutivo balear, defiende que el Estado debe “dar un toque” a la presidenta del Govern, Francina Armengol, del mismo modo que “ha tenido que ponerse las pilas con un 155 en Catalunya”. También niega que haya personas mayores que no se sepan comunicar adecuadamente en castellano: “Dicen que hay abuelitas que no entienden el castellano. ¿De verdad? Puede que exista una pero si está sana es porque no ha tenido ningún problema con su médico en todo este tiempo”.

Manifestación contra el requisito

Mascaró ha comentado en varios medios de comunicación que su próxima intención es crear la asociación Sociedad Civil Balear. Por el momento, Mos Movem se limita a convocar manifestaciones en contra del requisito del catalán en la sanidad pública. La última fue el pasado domingo, en el que tan solo reunieron a unas 2.500 personas, a pesar de que pagaron páginas enteras en los principales periódicos de las islas para anunciar la convocatoria.

La manifestación contaba con el apoyo del PP y de Ciudadanos, cuyos dirigentes se dejaron ver a pie de calle junto con los manifestantes -aquellos mismos que, en un desfile del Carnaval, llevaban una pancarta que decía “el catalán nos mata”. Entre otros, estaban el presidente del PP balear, Biel Company, el portavoz de Ciudadanos, Xavier Pericay, y el líder de Actúa Baleares, Jorge Campos. Este último dijo que “es una locura que hoy en día estemos perdiendo grandes sanitarios por culpa además de la imposición del catalán, que no es nuestra lengua”.

También asistió el expresident balear y actual senador José Ramón Bauzá (PP), quien durante su mandato intentó derogar el modelo de inmersión lingüística en las escuelas de Baleares a través del Tratamiento Integral de Lenguas. Esta iniciativa le pasó una factura electoral en la pasada legislatura y provocó la mayor movilización social en la historia de las islas, con 90.000 ciudadanos en la calle bajo el lema “Contra la imposición, defendamos la educación”.