La portada de mañana
Acceder
16 grandes ciudades no están en el sistema VioGén
El Gobierno estudia excluir a los ultraderechistas de la acusación popular
OPINIÓN | 'Este año tampoco', por Antón Losada

El abogado de Bárcenas: “Ha tenido cuatro años para destruir las pruebas”

EUROPA PRESS

Alfonso Trallero, el abogado del extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas, ha defendido la inocencia de su cliente y se ha quejado de que haya sido enviado a prisión por su patrimonio en dos bancos de Ginebra. “Lo que no se puede decir es que porque uno tenga 25, 30 ó 40 millones de euros en Suiza, esos 40 millones tienen un origen delictivo”, ha dicho.

En declaraciones a las puertas de la Audiencia Nacional, Trallero negó que Bárcenas haya dejado en algún momento de colaborar con la investigación que dirige el juez Pablo Ruz y rechazó, tal y como sostiene el magistrado, que exista riesgo de fuga.

“Es imposible que el señor Bárcenas se pueda fugar y pueda destruir pruebas, es una de las personas más conocidas y tiene una fisonomía que se le reconoce en cualquier parte del mundo a la que vaya”, ha alegado antes de recordar que cuando “ha estado fuera” le han hecho fotos diciendo: “Está cenando en no sé dónde”. “¡Es imposible que se fugue, imposible!”, ha añadido.

Tras justificar el patrimonio de su cliente por la evolución del mercado bursátil en el que invirtió, Trallero ha indicado que Bárcenas “ha declarado ocho veces y ha contestado siempre que se le ha preguntado, menos la última con el tema de los papeles de 'El País' que no declaró”. “¿Entonces cómo que no colabora con la investigación?”, se ha preguntado.

A su juicio, si el ex tesorero quisiera destruir pruebas “cuatro años después” de que fuera imputado por primera vez en el 'caso Gürtel', lo habría “hecho ya”. “Ha tenido cuatro años para destruirlas”, ha argumentado para señalar a continuación que las acusaciones de la Fiscalía Anticorrupción “no tienen fundamento”. “Entendemos que lo podremos acabar demostrando”, ha añadido.

Trallero ha indicado, en todo caso, que el antiguo responsable de las finanzas 'populares' “ha encajado bien en lo personal” la medida de ingreso de prisión porque, según ha dicho, es “un hombre con una fortaleza anímica muy grande”. Aun así, ha dicho que estaba “evidentemente desconcertado” porque, a su entender, “no podía pensar que fuese a acabar esta situación hoy así como está acabando”.

A este respecto, ha adelantado que en los próximos días presentará un recurso de apelación ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional para pedir la revocación del auto de ingreso en prisión y solicitar su inmediata puesta en libertad sin fianza. “Es lo que consideramos que debe acordarse”, ha dicho.

Según el auto de prisión, el extesorero ha ofrecido una “explicación parcial, inconsistente y manifiestamente insuficiente sobre el conjunto de actividades y operaciones patrimoniales en las que el mismo interviene a través de sus cuentas en Suiza”, y ha entrado en contradicción con las notas de los gestores de sus cuentas y con su presunto testaferro, Iván Yáñez, que hoy también ha prestado declaración.

Pese a que en enero se descubrió una primera cuenta millonaria en Suiza, Bárcenas continuó con su lujoso ritmo de vida, con cenas en caros restaurantes o viajes a Canadá y Francia para esquiar, peineta incluida a su llegada a Barajas. Fueron estos desplazamientos los que llevaron ya al juez a retirarle el pasaporte, prohibirle salir del país y obligarle a comparecer quincenalmente en la Audiencia Nacional ante la amenaza de que no regresara a España. Con todo, las imágenes estos meses del ex tesorero entrando y saliendo de su casa así como de los juzgados ha sido una constante informativa.

El juez Ruz explica en su auto que adopta esta medida “para asegurar su presencia en el proceso, evitando el riesgo de fuga y asegurando la preservación de fuentes de prueba relacionadas con los delitos imputados, en evitacion de su alteración por parte del imputado, finalidades que únicamente se pueden salvaguardar con la medida cautelar que se adopta”.

Ruz resalta en su argumentación sobre Bárcenas la “presunción de contar con patrimonio en el extranjero, de difícil control e incautación judicial”.