El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha salido de su reunión en La Moncloa con Mariano Rajoy con mucho escepticismo y un mensaje claro: la formación se inclina en estos momentos por votar “no” a la investidura y mantendrá su posición si no cambia la actitud del Gobierno. Esteban ha explicado que el apoyo no depende “de una partida presupuestaria aquí o una competencia allá”, sino que será necesario un mayor respeto al autogobierno de Euskadi y un cambio en las formas de hacer política.
Tras esta cita, no se han emplazado a una nueva conversación ni han decidido formar un equipo negociador: “Si Rajoy considera que nos tiene que volver a llamar, acudiremos porque nunca nos vamos. Cuando veamos esa voluntad, hablaremos de cosas concretas”.
Esteban ha calificado las posturas entre ambos de “absolutamente alejadas” y ha señalado entre las causas los 4 años de mayoría absoluta del PP “sufriendo el rodillo una y otra vez”, las modificaciones competenciales “a través del decreto ley”, las distantes relaciones con el Gobierno vasco así como con el PP autonómico. De hecho, Esteban ha recordado que hace sólo una semana Moncloa anunció un nuevo recurso a la ley municipal y a la de adicciones, lo que reafirma a la formación en que para apoyar a Rajoy en su pretensión de volver a ser presidente tiene que entender que “ya no puede seguir funcionando así”.
El portavoz ha relatado que en la conversación han salido a relucir muchos temas pero que ninguno en concreto se ha convertido en condición ni Rajoy ha avanzado en qué estaría dispuesto a ceder. Así, han abordado la reforma constitucional en la que Esteban ha sido muy escéptico sobre su utilidad si el PP sólo está de acuerdo con el PSOE y Ciudadanos y no cuenta con los nacionalistas. Cuestiones económicas, de infraestructuras y de convivencia, en palabras de Esteban, también han formado parte de la conversación.
El papel de la política penitenciaria
El papel del acercamiento de presos, expresado por el lehendakari esta semana durante un curso de verano, nunca ha sido una exigencia sino una mera constatación de que forma parte de la agenda vasca. Esteban ha aclarado que la política del PNV “no la marca el lehendakari ni lleva las negociaciones” y que nunca se ha puesto sobre la mesa para negociar.
Con quien se ha mostrado muy molesto es con el PSOE, por querer trasladarles la presión y hablar de “cierta afinidad ideológica”. Así, Esteban ha dicho que sólo ve como posibilidades “ir a unas terceras elecciones o un gobierno del PP” y que el “bloqueo” es del PSOE.