Albert Rivera ha anunciado que Ciudadanos ha decidido votar a favor el techo de gasto pero que no va a apoyar la subida de impuestos para las bebidas azucaradas, el alcohol y el tabaco que acaba de acordar el Gobierno con el PSOE . “No compartimos que la vía para recaudar más sea metiendo la mano en el bolsillo de los españoles”, ha asegurado el presidente de Ciudadanos. Según ha desvelado, él mismo cerró anoche telefónicamente el acuerdo con Mariano Rajoy como colofón a “varias semanas de negociaciones”.
El líder de Ciudadanos, que ha comparecido en rueda de prensa después de la reunión mantenida con su Ejecutiva, ha negado haberse sentido relegado ni “ninguneado” en la negociaciones presupuestarias por el hecho de que el Gobierno haya dado prioridad al PSOE. Es más, se ha felicitado por el cambio de postura de los socialistas recordando que su partido ha estado desde el principio reclamándoles que no se cerraran en banda al diálogo y se bajaran del “no es no”.
Dado que la subida del impuesto de sociedades se tramitará conjuntamente en el mismo paquete que la subida de impuestos indirectos, y pese a estar de acuerdo con la medida, Ciudadanos, según ha matizado en su comparecencia, tampoco votará a favor de esa reforma y se abstendrán.
Rivera ha explicado que si apoyan el techo de gasto es porque su partido ha conseguido de Rajoy la garantía de que los Presupuestos recogerán una inversiónde de 3.800 millones -Ciudadanos reclamaba 5.000 millones- para cumplir con las medidas incluidas en el pacto de investidura.
Entre los compromisos cerrados el líder de Ciudadanos ha destacado que habrá una tarifa plana para los autónomos; que se incrementará en dos semanas el permiso de paternidad; que habrá un complemento salarial para los jóvenes con salarios más bajos; que también habrá un cheque de formación para que los que se queden sin trabajo pueda “reformular su vidas laboral”; más inversión para I+D y para dependencia, asi como más ayudas para libros de textos y para un aumento de profesorado. Junto a esto ha sumado el incremento de las partidas para Justicia y para la lucha contra el fraude fiscal.
Precisamente en este último apartado es donde más ha chocado Ciudadanos con el Gobierno dado que su partido reclama que Hacienda obligue a los que se acogieron a la amnistía fiscal a devolver toda la penalización por la regularización, no solo el 3%.
Rivera ha insistido en que el ministro Cristóbal Montoro debe cumplir con ese compromiso adquirido en el pacto de investidura, como una de las vías para recaudar más y no tener que recurrir a la subida de impuestos, como acaba de hacer el Gobierno. Esos mil millones, que calculan que podrían recaudarse en un principio, podrían invertirse en aplicar las políticas sociales que ellos demandan.
“Un acuerdo satisfactorio”
De momento, Rivera se ha dado por satisfecho. “Creo que hemos llegado a un acuerdo satisfactorio. El pacto en un mes avanza a buen ritmo”, ha comentado, mientras aseguraba que ambas partes seguirán hablando a lo largo de las próximas semanas para cerrar otros temas.
No obstante, ha recordado que cuando iniciaron el diálogo, su partido ya puso tres condiciones al jefe del Ejecutivo para apoyar posteriormente los Presupuestos Generales del Estado: que no hubiera subida de IVA ni de IRPF; que no hubiera recortes en educación y sanidad; así como el impulso a nuevas medidas presupuestarias para la clase media trabajadora, la gran perjudicada, a su juicio, en la crisis. “Si esas tres condiciones se cumplen, apoyaremos los presupuestos. De lo contrario no les daremos nuestro apoyo”, ha reitereado el líder naranja.
El decreto sobre el techo de gasto es la antesala de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2017. Aunque la fecha del debate todavía no se ha fijado se espera que vaya a pleno el próximo día 13.
Pero Rivera también se ha referido durante la rueda de prensa a otros asuntos de actualidad, como el referéndum que ha perdido en Italia el primer ministro, Matteo Renzi, y que ha propiciado su dimisión. Rivera cree que la reforma constitucional en Italia “era una buena idea” por lo que considera que “ha sido una mala noticia que quien gane el referéndum hayan sido los populistas”.
Dicho esto, ha advertido de que de ese fracaso se debe sacar “una moraleja” para cuando llegue el momento de abrir en España una reforma de la Constitución. “Que nadie aproveche la excusa para instalarse en el inmovilismo. Si queremos reformar la Constitución debe ser buscando el máximo consenso, lo contrario solo creará división”, ha opinado.
Rivera, además, ha rechazado que haya polémica con la líder de su partido en Cataluña, Inés Arrimadas, por su supuesto apoyo a un “referéndum separatista”. “Nada más lejos de la realidad. En nuestro partido en ningún caso cabe la idea de trocear la soberanía nacional”, ha zanjado.