La portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Inés Arrimadas, ha anunciado que este mismo jueves llamará a los barones socialistas que han cuestionado los pactos del PSOE con Unidas Podemos, ERC y PNV para que insten a rectificar a Pedro Sánchez y, si el candidato a la Presidencia del Gobierno se niega, intenten convencer a diputados socialistas de que no apoyen su investidura.
Así lo ha explicado en rueda de prensa en la sede de Cs tras una reunión entre la Gestora del partido y la dirección del grupo parlamentario. Tras señalar que “cada vez da más miedo” lo que se va conociendo sobre los acuerdos alcanzados por el PSOE, Arrimadas ha subrayado que en la formación naranja no se van a “dar por vencidos” e intentarán “hasta el último minuto” evitar que Sánchez pueda “consumar la infamia”.
Con este objetivo, llevará a cabo una ronda de llamadas a los barones del PSOE y empezará con aquellos que se han mostrado críticos con los planes de Sánchez, como los presidentes de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; de Aragón, Javier Lambán; y de Extremadura, Guillermo Fernández Vara. De otros que están en la línea de Sánchez, como la presidenta de Navarra, María Chivite, o el líder del PSC, Miquel Iceta, no espera que cambien de opinión.
Recuerda la dimisión forzada de Sánchez en 2015
Arrimadas ha recordado cómo dirigentes territoriales socialistas forzaron la salida de Sánchez de la Secretaría General del PSOE --dimitió en octubre de 2016-- poco después de que el Comité Federal del partido determinara que el candidato a la Moncloa no podría negociar su investidura con Podemos si este seguía defendiendo un referéndum de independencia para Cataluña.
Ahora que Sánchez “está haciendo cosas mucho más graves” que en aquel momento, “apelo a la valentía y al sentido de Estado de los barones socialistas”, ha manifestado, subrayando también que lo que está haciendo el líder del PSOE “no tiene nada de socialdemócrata” y que los socialistas deberían defender la igualdad de todos los españoles independientemente de dónde vivan.
Así, reclamará a los líderes territoriales socialistas que “intenten hacer recapacitar a Sánchez y frenar esta locura” y que, si éste se niega, “pidan a los diputados socialistas que no apoyen a ese Gobierno” de coalición con Unidas Podemos dependiente de partidos nacionalistas.
Aunque ha dicho que “lo más efectivo” sería que el contacto con los diputados socialistas lo hicieran los propios barones del PSOE, Arrimadas ha dicho que los representantes de Cs en distintas comunidades podrían dirigirse también a sus compañeros del PSOE en los parlamentos autonómicos para tratar de evitar “el Gobierno de la infamia y del insomnio”.
Asimismo, la portavoz de Ciudadanos ha dicho que se pondrá en contacto con el presidente del PP, Pablo Casado, para que acepte hacer presidente a Sánchez mediante un pacto entre el PSOE, el PP y Cs que dé estabilidad a la legislatura con una mayoría “constitucionalista” de 221 escaños.
Pactos que perjudican a otras comunidades autónomas
Por último, llamará a partidos regionalistas cuyos votos necesita el líder socialista para ser investido --como Teruel Existe, Coalición Canaria, Nueva Canarias y el Partido Regionalista Cántabro (PRC)-- con el fin de saber si asumen determinadas medidas que el PSOE ha pactado con fuerzas nacionalistas e independentistas o si les parece bien que EH Bildu se muestre favorable a ese futuro Ejecutivo.
Arrimadas considera que esos pactos perjudicarán a los ciudadanos de muchas comunidades autónomas y solo beneficiarán a los partidos nacionalistas, que “sacarán tajada de cada votación” que se haga en el Congreso para obtener ventajas para sus territorios.
Concretamente, ha denunciado que el acuerdo de gobierno entre el PSOE y Unidas Podemos contiene “medidas populistas” que serán “nefastas” para la economía española. Pero también ha reprochado que se acepte la demanda del PNV de “echar a la Guardia Civil de Navarra”, pues considera “una auténtica ofensa” a este cuerpo que Sánchez lo use “como moneda de cambio” para lograr su investidura.
Además, ha censurado que el PSOE haya pactado con ERC una mesa de negociación entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña, sometiendo luego sus decisiones a una consulta en esta comunidad, y la promesa de impulsar “las reformas necesarias para adecuar la estructura del Estado al reconocimiento de las identidades territoriales” de Cataluña y del País Vasco, como figura en el acuerdo con el PNV. “Las identidades nacionalistas, se entiende”, ha lamentado Arrimadas.
La actitud de Ciudadanos frente a la del PP y Vox
Ante este escenario, Ciudadanos sostiene que aún quedan cinco días para evitar un “desastre para España”. “Nosotros no nos vamos a quedar en la oposición, esperando a que se forme ese Gobierno y que lo haga muy mal, pensando que luego ya vendremos nosotros a gobernar, que es lo que están haciendo otros”, ha declarado Arrimadas.
Sin mencionar expresamente ni al PP ni a Vox, ha advertido de que ya no se puede tener esa “mentalidad vieja del bipartidismo” porque quizá lo que heredará el próximo Ejecutivo serán “las cenizas” del país.
La diputada de la formación naranja, que ha afirmado que está “en contacto permanente” con Casado, ha dicho que le gustaría que hubiera “más voces en el PP, empezando por su presidente”, que apoyaran la vía de los 221 escaños que propone Ciudadanos.