La Fiscalía General del Estado ha abierto este martes una capilla ardiente para despedir al fiscal general del Estado, José Manuel Maza, fallecido el sábado en Buenos Aires, y cuyos restos han sido repatriados esta madrugada.
Por ella han ido pasando las principales autoridades políticas y judiciales del país, como el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes; el presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas; el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; el ministro de Justicia, Rafael Catalá; la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal; el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez; el líder de Ciudadanos, Albert Rivera; o el rey Felipe VI.
En su “último adiós” a Maza, el presidente del Gobierno ha calificado al fiscal como un “excelente jurista”, una persona “recta, justa, equilibrada, sensata” que supo conocer “la realidad en la que se movía”. “Además de ser un excelente jurista, era una persona recta, justa, equilibrada, sensata y conocedor de la realidad en que se movía”, ha señalado Rajoy que ha calificado la muerte de Maza de “enorme pérdida” que “ha producido a todos un gran disgusto”.
El secretario general de los socialistas, que ha acudido a la capilla ardiente junto a la portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robles, ha destacado que José Manuel Maza fue “una persona que sirvió al Estado como gran jurista que era” con independencia de las discrepancias que su partido tuviera con él en su acción como fiscal general.
Por su parte, la ministra de Defensa ha destacado que Maza fue “un gran servidor público y un gran patriota” que siempre actuó con “sentido común, seriedad y rigor jurídico”. “Maza aplicó una máxima para todos aquellos que tenemos un cargo público y para todos los españoles, que es que la ley tiene que ser igual para todos y estar por encima de todos, eso es lo que verdaderamente nos hace iguales y nos permite vivir en una democracia”, ha apuntado la ministra.
“Al señor Maza le ha tocado tomar decisiones en un momentos muy difíciles y las supo tomar”, ha asegurado el líder de Ciudadanos. Rivera ha destacado que Maza fue “un buen jurista, una persona de Estado y un servidor público” al que le tocó “sufrir y aguantar presiones” en su lucha contra el terrorismo, la corrupción y la sedición.
Los restos de Maza llegaron a Madrid esta madrugada en un vuelo directo que salió este lunes por la tarde de la capital argentina. El fiscal Maza, de 66 años, había se encontraba en la capital argentina participando en varias actividades oficiales y donde murió por una infección renal que derivó en una infección generalizada.
El vuelo AEA042 de la compañía española, procedente del aeropuerto bonaerense de Ezeiza, tomó tierra en Barajas a las 4.55 horas de este martes tras un viaje de once horas. La repatriación del cuerpo de Maza, que se ha realizado en estricta intimidad por respeto a la familia, se produjo una vez cumplimentados todos los trámites legales, gestionados por la embajada española en el país austral y el Gobierno de Argentina.
Su pérdida ha generado consternación en la carrera fiscal y judicial, cuyos miembros han destacado su trayectoria como servidor público y su respeto a la ley y amor al derecho.