En un comunicado, el consistorio gerundense ha anunciado que, ante la respuesta “rápida y masiva” que ha tenido la iniciativa, está negociando el alquiler de un segundo convoy para dar respuesta a todos los que se han quedado sin billete.
UPyD Cataluña ha criticado la iniciativa porque constituye una “clara desviación de poder” fomentarla desde instituciones públicas y porque, a su juicio, resulta especialmente alarmante en un contexto de crisis que afecta a los ciudadanos y a la finanzas de las administraciones públicas.