La Institución Ferial de Madrid, Ifema, huele a escenario de batalla política. A la sustitución del presidente durante los últimos 24 años, José María Álvarez del Manzano, el Ayuntamiento de Madrid sumará este mismo jueves una iniciativa para “desengrasar” de cargos políticos muy bien remunerados una institución que nació en los años 80 del pasado siglo y que, de un tiempo a esta parte, ha reducido tanto sus resultados económicos como su presencia mediática. El nuevo presidente de Ifema, Luis Cueto, cuenta con el beneplácito de la alcaldesa Manuela Carmena para llevar a cabo esta operación de limpieza que tiene en su punto de mira a nombres tan reconocidos en Madrid como Manuel Cobo o Arturo Fernández.
“Vamos a proponer que todos los cargos políticos dejen de estar remunerados”, aseguran fuentes municipales próximas a Cueto, coordinador general del Ayuntamiento. “Ifema no puede ser un lugar donde se coloque la gente. Tenemos que profesionalizar la institución”. Este mismo jueves se reunirán Manuela Carmena y el presidente ejecutivo de Ifema, Luis Eduardo Cortés. Sobre la mesa estará el plan municipal para la institución, señalan desde el Ayuntamiento.
Ifema cuenta en este momento con tres órganos de dirección. El Ayuntamiento propondrá directamente la eliminación de uno de ellos: la Comisión Permanente de la Junta Rectora para la Planificación y Programación Ferial (aquí, a partir del artículo 14). Permanecerían activos la Junta Rectora y el Comité Ejecutivo.
No lo tendrá fácil Luis Cueto, a tenor de la composición de Ifema. Tres instituciones se dividen el 93% del capital de la institución a partes iguales: el propio Ayuntamiento, la Comunidad de Madrid y la Cámara de Comercio. El 7% restante está en manos de la Fundación Montemadrid (Caja Madrid hasta 2014).
El Gobierno regional se mantiene en manos del PP, aunque la pérdida de la mayoría absoluta en las autonómicas de mayo abre la puerta a que el Ejecutivo de Cristina Cifuentes no pueda vetar el debate y los cambios si los demás grupos de la Asamblea los apoyan. En cuanto a la organización empresarial, fuentes municipales señalan a eldiario.es que se ha mostrado receptiva en los contactos informales que se han mantenido hasta ahora.
La intención es que Ifema deje de ser un cementerio de elefantes para exdirigentes políticos. No solo por el ya destituido Álvarez del Manzano. Según un informe interno del Consistorio, la institución mantiene en nómina a Fermín Lucas (hermano del expresidente de Castilla y León Juan José Lucas) o Manuel Cobo (exvicealcalde de Madrid). Este último ni siquiera aparece en la actualización del organigrama realizada en julio puesto que tiene una especie de cargo intermedio denominado “coordinador de gestión”, lo que no le impide contar con despacho propio, secretaria y coche oficial.
El informe municipal, al que ha tenido acceso eldiario.es, se prodiga bastante en sueldos, que cifra en 200.000 euros en algunos casos, el uso de personal asistente sin control, coches oficiales y tarjetas de crédito. Y denuncia que la presencia en la institución de Cobo, secretario de Política Local del PP, es limitada: “Viene una mañana a la semana”.
Arturo Fernández, un dirigente con deudas
En el Consistorio recuerdan que Cobo fue nombrado por la Comunidad de Madrid cuando la presidenta era Esperanza Aguirre y después de que el número dos de Gallardón viera como su jefe político se iba solo al Ministerio de Justicia. Paradójicamente, Cobo fue rescatado en Ifema por su antigua enemiga en el PP, con quien rivalizó por dirigir el partido en Madrid cuando el enfrentamiento interno entre Gallardón y Aguirre alcanzó sus cotas más altas. Hoy Aguirre contempla los cambios desde la oposición en el Palacio de Cibeles.
Otro de los conflictos a analizar es la presencia del empresario Arturo Fernández en los órganos rectores de Ifema. El presidente de la Cámara de Comercio de Madrid está en el Comité Ejecutivo a pesar de que sus empresas de restauración y catering mantienen una deuda millonaria con la propia institución.
“Estatutariamente, la permanencia de Arturo en Ifema puede ser perfectamente legal y él puede argumentar que está allí de pleno derecho. Pero ética y moralmente es un auténtico escándalo”, aseguran desde el equipo de Carmena. El Ayuntamiento tratará de buscar una salida a todas las anomalías dialogando con el PP de Cifuentes de manera cordial, dicen las mismas fuentes.
Según el último informe de gestión elaborado por Deloitte y consultado por eldiario.es, los beneficios en 2014 serán de 200.000 euros (en 2012 se consiguió un millón de euros). La crisis, las dificultades de las empresas para organizar eventos y la “competencia muy agresiva en precios han dado como consecuencia directa el deterioro de los resultados del sector, obligando a redimensionar las ferias y contener los costes de participación”, remata la auditoría. Para el Ayuntamiento existen otras posibilidades, como la de recortar en cargos prescindibles y bien pagados.