El Ayuntamiento de Palma investiga una presunta fiesta ilegal dentro del cuartel de la Policía Local

El Ayuntamiento de Palma (Mallorca) ha abierto una investigación para esclarecer si la semana pasada se celebró una fiesta presuntamente ilegal en la antigua cafetería de la Policía Local en la que habrían estado presentes una veintena de agentes. Las pesquisas buscan aclarar si, con ello, los participantes infringieron las actuales restricciones sanitarias.

En concreto, los hechos habrían tenido lugar el martes 13 de abril, sobre las 23.00 horas. Desde la concejalía de Seguridad Ciudadana, encargada de averiguar qué ocurrió, afirman, sin embargo, no tener constancia del evento por el momento y si, de haber tenido lugar, se hubiera contravenido la normativa que en Baleares establece el toque de queda a las 22.00 horas

Al parecer, la celebración fue organizada para despedir a un agente del cuerpo con más de 35 años de experiencia a sus espaldas. Ese día era su última jornada de servicio previa a su jubilación. Los demás agentes se habrían reunido por sorpresa para decirle adiós, entregarle varios regalos y fotografiar el momento.

Fuentes próximas a los allí presentes señalan a elDiario.es que los participantes eran esencialmente miembros del Grupo de Acción Preventiva (GAP) de la Policía Local de Palma, quienes esa noche se encontraban de servicio. Todos ellos se juntaron en el espacio en el que hace más de quince años se ubicaba el bar del cuartel y que desde hace más de 10 años se encuentra habilitado como sala-museo para que los efectivos puedan merendar y distenderse en sus momentos de descanso. La sala, que está habilitada durante las 24 horas del día, tiene unos 60 metros cuadrados, con 2 sillas para que se sienten los agentes en los extremos de las mismas.

Es usada por todas las unidades de servicio durante las 24 h del día

Según las mismas fuentes, los policías se tomaron una pausa para llevar a cabo la merienda cena y despedir a su compañero. A la misma se apuntaron tres de los agentes investigados en varias de las piezas del caso Cursach, que durante más de cinco años puso la lupa en un presunto entramado policial dirigido a proteger los intereses del considerado rey de la noche mallorquina, Bartolomé Cursach.

Como señalan, los turnos del GAP cubren la franja horaria situada entre las 18.00 y las 02.00 horas y tienen establecido su periodo de descanso, habitualmente, en torno a las 22.30 horas, que es cuando la unidad nocturna ya ha salido a patrullar las calles. Las mismas fuentes apuntan a que la sala en la que tuvo lugar la merienda cena está condicionada con las medidas de separación y desinfección pertinentes.

Ahora, el Ayuntamiento se centra en averiguar si efectivamente fue así y si se deben adoptar medidas de sanción en caso de que los agentes se hubieran saltado las normas previstas, que limitan las reuniones y encuentros a un máximo de seis personas y dos núcleos de convivencia en los espacios interiores, unas limitaciones de las que quedan excluidas las actividades laborales.