Bauzá asume el coste político de su rebeldía contra las prospecciones
“Nuestro primer deber es con los ciudadanos de Baleares”. Con esta sentencia, el presidente del Govern, José Ramón Bauzá, ha justificado el voto contrario a las prospecciones por parte de cuatro senadores del Partido Popular, que rompieron el miércoles la disciplina de voto y se alinearon con el PSOE para votar a favor de su moción.
Tras una mañana de mucha tensión, en la que se intentó por todos los medios consensuar un texto que contentase por igual a las dos formaciones mayoritarias, la falta de acuerdo a la hora de la votación puso contra las cuerdas a los representantes del PP, atrapados entre la fidelidad a su partido y su coherencia con el discurso mantenido hasta ahora, frontalmente opuesto a cualquier tipo de prospección en aguas del Mediterráneo. Finalmente, fueron cuatro de los cinco los que optaron por esta segunda vía.
“Por encima de mi cargo como presidente de mi partido, soy presidente de la Comunitat Autònoma”, explicaba Bauzá en una rueda de prensa convocada de urgencia para alinearse con los rebeldes e insistir en que desde las Islas no se cederá ni un ápice en este capítulo.
Aunque hay quien sólo quiere ver un gesto de cara a la galería, lo cierto es que en las filas populares del archipiélago reconocen haber dado un “salto cualitativo importante” en su pulso con Madrid en contra de las prospecciones. No en vano, si algo ha premiado José Ramón Bauzá durante la presente legislatura ha sido la lealtad entre sus colaboradores. Una virtud que el jefe del ejecutivo autonómico aprecia sobremanera y que pasa, indefectiblemente, por cerrar filas ante cualquier posible disidencia.
Desde el Govern Balear no entienden que los cuatro senadores díscolos hayan traicionado al partido. El propio Bauzá recuerda que el Senado es una cámara de representación autonómica y, como tal, “los representantes de Baleares deben defender los intereses de sus ciudadanos”.
Así se lo recordó también en privado el jefe del ejecutivo balear al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, instantes antes de que arrancase la votación en la Cámara Alta. Y por eso mismo, confían desde el PP en que no haya sanciones contra quienes rompieron la disciplina de voto.
El enfado en Madrid, sin embargo, no se disimula. Al menos en el Ministerio de Industria, cuyo subsecretario, Enrique Hernández Bento, ha calificado de “irresponsable e incoherente” el rechazo del PSOE a las prospecciones, y se ha cebado especialmente con los cuatro senadores conservadores , a quienes acusa de buscar un rédito electoral a corto plazo, en una actitud que define como “demagógica”.
De momento, el Consejo de Dirección del Grupo Popular en el Senado ya ha anunciado que la próxima semana estudiará las posibles sanciones que se deban aplicar a los cuatro senadores, mientras en la sede palmesana del PP muestran su confianza en que no se produzca tal sanción.
Fuentes próximas al ejecutivo balear subrayan por su parte la “valentía” de José Ramón Bauzá, quien “se ha jugado su cartel de ministrable en Madrid en defensa de los intereses baleares” con un gesto que, de paso, le servirá para granjearse las simpatías de muchos ciudadanos isleños.
“Llevamos desde 2011 luchando contra las prospecciones y no vamos a dejar de hacerlo”, advierten estas mismas fuentes, que repiten como un acto de fe aquella frase pronunciada en su día por José Ramón Bauzá: “El petróleo de Baleares es el turismo”.