La portada de mañana
Acceder
El jefe de la Casa Real incentiva un nuevo perfil político de Felipe VI
Así queda el paquete fiscal: impuesto a la banca y prórroga a las energéticas
OPINIÓN | 'Siria ha dado a Netanyahu su imagen de victoria', por Aluf Benn

Casado traslada a Pedro Sánchez que “ni cesión, ni contemporización, ni diálogo” en Catalunya

Pablo Casado ha llevado su reunión con Pedro Sánchez en Moncloa su discurso más duro sobre Catalunya. El líder del PP no comparte la estrategia de distensión iniciada por el presidente socialista: “No vamos a estar ni en la cesión, ni en la contemporización, ni en dialogo” con los que “quieren romper España”. Sánchez le ha pedido una “oposición de Estado como la que ha hecho el PSOE cuando ha habido problemas muy graves, por ejemplo, en el ámbito del terrorismo”, según ha dicho la presidenta del PSOE, Cristina Narbona.

“Le he vuelto a decir que si la Generalitat y los partidos independentistas siguen con su hoja de ruta de ruptura el PP solicitará la aplicación del 155 garantizando los votos de nuestra mayoría absoluta en el Senado”, ha expresado el recién estrenado líder conservador que ha precisado que la activación de la intervención de la autonomía la reclamaría si el Govern vuelve a leyes de desconexión o da pasos hacia la autodeterminación o consigue “un referéndum pactado” con el Gobierno. “No cabe ni el apaciguamiento ni la confianza”, ha agregado.

Casado ha cerrado la puerta a la reforma de la Constitución que Sánchez plantea como solución para el conflicto territorial: “No se dan las condiciones”, le ha transmitido al presidente. Lo que no ha querido es revelar qué le ha dicho Sánchez sobre sus “exigencias y reclamaciones”, como la reforma electoral para que gobierne en los ayuntamientos la lista más votada o que no se comiencen a acercar a cárceles de Euskadi a los presos etarras, como ha anunciado el Ejecutivo.

Casado ha desgranado los asuntos en los que pretende ser leal al Gobierno, pero con condiciones. “Voy a ser firme pero también responsable”, ha dicho. Sánchez le ha reclamado su apoyo para cinco asuntos de Estado, entre los que incluía la violencia de género, Catalunya o la inmigración –un asunto en el que el PP ha endurecido sus posiciones y que el Gobierno le afea por “alinearse” con posiciones xenófobas de otros países europeos–. En cuanto a la violencia machista, Casado le ha pedido al Gobierno que mantenga el “desarrollo” del pacto alcanzado en el Congreso.

Sobre inmigración, Casado ha pedido al Gobierno que no caiga en el “buenismo” y que estará a su lado en lo que tenga que ver con el apoyo y el refuerzo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las fronteras así como en el incremento de fondos para los países de origen –lo que ha denominado un Plan Marshall para África–. En el PSOE saludan esa posición que no esperaban en los últimos días.

“Le he transmitido al señor Sánchez que el PP va a colaborar lealmente en las garantías de la defensa de España, del estado de derecho y de la Constitución y las instituciones”, ha comenzado Casado, que también ha mencionado la política económica si garantiza la creación de empleo. También vamos a ser responsables a la hora de que España tenga el prestigio que merece a la hora de relacionarse con los socios de la UE, en la negociación del presupuesto comunitario y en la lucha contra el terrorismo internacional“, ha resumido.

Sánchez reclama una oposición leal

Sánchez no ha comparecido tras la reunión, que se ha prolongado durante casi tres horas, y lo hará este viernes en la rueda de prensa de balance de curso. El presidente se ha limitado a explicar en Twitter que le ha pedido a Casado lealtad para asuntos de Estado.

Narbona ha celebrado que Casado declare que va a hacer una “oposición leal”. “Creemos que es el inicio de una nueva etapa”, ha dicho la presidenta socialista, que espera que haya comprendido “que el arranque en su liderazgo ha sido completamente equivocado”, especialmente por sus posiciones sobre la inmigración.

“En la reunión se ha comprometido a llevar a cabo una oposición leal y responsable. Esperamos que esto implique el inicio de una nueva etapa, en la que estaremos muy atentos si el PP decide caer en la tentación de ser demagógico otra vez”, ha dicho Narbona.

“Es evidente que Casado ha querido introducir en la reunión unas cuestiones en las que mantenemos posiciones contrarias, como la interpretación de la política económica”, ha admitido la presidenta socialista, que también ha reprochado al jefe de la oposición que destine “tanta atención al desafío secesionista” mientras ni siquiera ha mencionado la “desigualdad”, ha relatado Narbana.

La dirigente socialista también ha defendido la “legitimidad” con la que Sánchez llegó al Gobierno ante las críticas de Casado, que ha reprochado que sea presidente “por una moción de censura con compañeros de viaje poco recomendables”. “De nada ha servido esa moción de censura si no se avanza en las políticas y solo era una alianza por el no, por el quítate tu para ponerme yo”, ha expresado el presidente del PP, que ha recordado que la oposición es “mayoritaria” en las Cortes. “Yo no he visto un proyecto para España. Ni había en la moción ni ahora desde el Gobierno”, ha zanjado.

Casado llegaba al Palacio de la Moncloa pasadas las cinco de la tarde y en plena ola de calor. Él y Sánchez se saludaban con semblante serio. El encuentro se ha prolongado durante casi tres horas. “Una reunión que ha sido muy larga, de trabajo. Además de la cortesía de saludarnos. Soy una persona de acción no me gusta perder el tiempo”, ha dicho Casado. En el Gobierno, que ha cedido la sala desde la que se dan las ruedas de prensa del Consejo de Ministras como gesto de “cortesía” para el líder del PP, aseguran que ha sido “una larga reunión que ha dado para trabajar muchas cosas”.