La Mesa del Congreso le ha dado un fuerte varapalo al Partido Popular. Aunque con Ciudadanos suele tener la mayoría necesaria para dirigir las votaciones según los intereses del partido, en esta ocasión la formación de Albert Rivera se ha alineado con el resto de formaciones para rechazar el recurso de los populares para paralizar la comisión de investigación sobre su financiación.
PSOE, Ciudadanos y Unidos Podemos habían conseguido llegar a un acuerdo en la comisión de investigación sobre la presunta financiación ilegal del Partido Popular para que empezaran los trabajos sin esperar a un informe de los letrados pedido por el PP para delimitar el objeto y los ámbitos temporal y territorial de investigación de la comisión.
El vicesecretario general de Organización del PP, Fernando Martínez Maillo, anunció entonces que utilizarán “todas la acciones correspondientes en defensa de la legalidad”. Primero presentarían el recurso en la Mesa del Congreso, aunque sabían que no contaban con la mayoría suficiente para aprobarlo. En caso de que fuera rechazado, como así ha sido, el dirigente del PP advirtió que podrían llevar la comisión al Tribunal Constitucional.
Los tres grupos parlamentarios han pactado que los primeros comparecientes sean los tesoreros de la formación conservadora, de manera que Luis Bárcenas tendrá que ir a declarar a la Cámara Baja el próximo 26 de junio.
La pasada semana el parlamentario de Ciudadanos, Toni Cantó, destacó que hubieran preferido “acotar el ámbito temporal, desde que Rajoy fue nombrado presidente del PP, en 2003”. Cantó explicó que el resto de los partidos no estaba de acuerdo con este punto, pero además, añadió que el PP no ha querido pactar nada. “El señor Martínez Maillo no se ha sentado a negociar, ha dinamitado cualquier acuerdo, solo ha intentado bombardear la comisión”, aseguró el diputado de Ciudadanos.