- El boletín oficial del Congreso publicó este miércoles la acreditación para que el sindicato falangista TNS use los recursos de la cámara para representar a los trabajadores del Congreso
Están a punto de cumplirse 35 años desde el golpe de estado de Tejero y la Falange ha encontrado una manera de entrar en el Congreso de los diputados. El boletín de Las Cortes, publicado este miércoles, recoge la resolución que acredita al sindicato Trabajadores Nacional-Sindicalistas (TNS) para iniciar su labor de puertas adentro del Congreso. El citado sindicato comparte sede con la Falange, en el número 2 de la madrileña calle Silva y fue fundado el 18 de julio de 2003, como homenaje al Golpe de Estado que provocó la Guerra civil.
La entrada de la Falange en el Congreso es iniciativa de un miembro del personal laboral de la cámara llamado Jose Carlos Aparicio Lozano. Este trabajador del Congreso es una persona cercana a la ideología fascista y formó parte de la candidatura de la Falange en las elecciones de 2011 a la Comunidad de Madrid en el puesto 110. Su reclamación de convertirse en delegado sindical de TNS ha sido atendida favorablemente por la Secretaría General del Congreso.
Fuentes oficiales del Congreso, consultadas por eldiario.es, aseguran que “no se puede impedir que los sindicatos falangistas que no han sido ilegalizados tengan espacio de trabajo en la casa”. Se da la circunstancia de que la misma institución que aprobó la Ley de Memoria Histórica que impide el uso de imágenes franquistas autoriza ahora que TNS pueda colgar en los tablones de anuncios su propaganda con el yugo y las flechas.
El sindicato TNS, que ahora podrá trabajar en el Congreso, ha sido uno de los mayores defensores del asalto a la librería Blaquerna en donde fueron atacados algunos diputados catalanes como Josep Sánchez Llibre. Basta consultar Youtube para encontrarse al portavoz oficial de TNS, Jesús Muñoz, en un acto público a la voz de “gloria eterna a los héroes de Blanquerna”.
La decisión de la Secretaría General del Congreso solo puede ser revocada por la Mesa de la cámara. La legislación española es difusa en cuanto a la exibición de símbolos franquistas. En estos momentos, los sindicalistas del TNS cuentan con todos los permisos para usar imágenes como el yugo y las flechas en su propaganda sindical de puertas adentro del Congreso. La certificación que permite el trabajo de este sindicato ha llegado apenas una semana antes del 35 aniversario del Golpe del Estado del 23F.