El apoyo del Partido Nacionalista Vasco (PNV) junto al acuerdo con Ciudadanos para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado han reforzado el relato del Partido Popular, que se presenta como única fuerza política para dar estabilidad. El Gobierno asume que con este paso fundamental se consolida para seguir adelante con la legislatura en un ambiente poco favorable por la corrupción.
Pese a la gravedad de las actuaciones judiciales y operaciones policiales contra dirigentes del PP que en su último episodio ha llevado a la cárcel al expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, recordaba que tanto el partido como el Ejecutivo de Rajoy “ya han vivido situaciones similares en otras ocasiones. En el Gobierno trabajamos con la misma actividad que siempre. No vamos a entrar en una depresión absoluta que tenga efectos en la gobernabilidad del país”.
Mariano Rajoy entraba este miércoles en el hemiciclo del Congreso acompañando al ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro. Pese a que ha sido uno de los ministros que más ha sido vapuleado desde la anterior legislatura, incluso por dirigentes del PP, Rajoy quiso mostrar su apoyo explícito a un miembro de su Gobierno que ha conseguido superar una prueba que podría haber puesto en difícil equilibrio la legislatura.
Sacar adelante el debate de totalidad de las cuentas de 2017 da oxigeno al PP. La formación conservadora utilizará este hito para intensificar su discurso de “la buena marcha de la economía” para contrarrestar la pésima imagen de los dirigentes del partido detenidos y condenados por casos de corrupción.
Tras la consecución de este paso, fuentes del Gobierno insistieron en que “no hay ninguna preocupación” por la moción de censura de Unidos Podemos, que entienden “que no está dirigida contra el presidente, sino contra el PSOE”. En este sentido, aseguraron que el Ejecutivo de Rajoy “está más preocupado por la debilidad de los socialistas y su futuro incierto que por el follón que va a montar Podemos, que como hemos visto se vuelve contra del que lo monta”.
En el debate han sido patentes los llamamientos de Montoro al PSOE para conseguir un acuerdo presupuestario y las contradicciones de los socialistas para mostrar su posición contraria a las cuentas cuando habían apoyado el techo de gasto y el objetivo de déficit.
El portavoz del PNV, Aitor Esteban, deslizaba en su argumentación para explicar su apoyo a las cuentas del Ejecutivo de Rajoy la falta de alternativas. El político nacionalista volvía a poner en duda el movimiento de Unidos Podemos con la moción de censura asegurando que “igual lo que se quiere es colocar a Rajoy como única figura de estabilidad”.
El protagonismo de Unidos Podemos tras el anuncio de la moción los ha colocado en la diana del resto de los partido políticos. En este sentido, el portavoz económico de Ciudadanos, Toni Roldán, declaró que “hay que tener muy claras las prioridades y era mejor negociar que no hacer nada. La opción no es ponerse a llorar, subirse a un autobús, sino negociar y conseguir mejoras concretas. Los españoles no pueden esperar, necesitamos soluciones y la manera es negociar y arrancar medidas”.
Con esta perspectiva el Partido Popular ya tiene la mirada puesta en septiembre, cuando hay que negociar los presupuestos de 2018. El Ejecutivo confía en seguir dando buenas noticias económicas, especialmente en el ámbito del empleo con el inicio de la temporada turística, y tratará de solventar lo mejor posible la declaración de Mariano Rajoy ante los tribunales por el caso Gürtel .
“El clima de confianza entre PNV y PP es un clima que debería permitirnos que en el futuro siguiéramos dialogando y poder alcanzar nuevos acuerdos. Lo que ocurre es que cada momento tiene su afán y el afán del 2018 se iniciará a partir de que se apruebe este Presupuesto”, declaró el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando.