Cospedal y el PP seguirán estirando el chicle parlamentario de las 'fake news'

Un nuevo “grupo de trabajo” sobre fake news echará a andar este martes en el Congreso de los Diputados. El nuevo órgano surge a raíz de una propuesta de la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, para tratar la problemática de la desinformación en el ámbito de la comisión de Defensa del Congreso, a pesar de que otra comisión lleva desde noviembre de 2016 dedicada en exclusiva a debatir “cuestiones relativas a la ciberseguridad en España” con una amplia gama de expertos, con los que ha tocado en numerosas ocasiones la “amenaza” de las fake news.

Entre los ponentes que han pasado por esa comisión, denominada de “Seguridad Nacional” y de la que forman parte diputados y senadores, está el director del Centro de Excelencia de Comunicaciones Estratégicas de la OTAN (que analiza la desinformación y la propaganda proveniente de Rusia); la fiscal coordinadora nacional contra la ciberdelincuencia; el director del Instituto Nacional de Ciberseguridad o el jege del gabinete jurídico de la Plataforma en Defensa de la Libertad de Información.

Como recuerda esta última organización, instituciones internacionales como la ONU, la UNESCO o la OSCE se han posicionado en contra de combatir la desinformación desde el prisma de la defensa o la seguridad nacional, al dar pie a “establecer límites injustificados y desproporcionados a la libertad de expresión”. A pesar de ello, Cospedal insistó en una carta a la comisión de Defensa del Congreso en la necesidad de crear este nuevo grupo “que reúna a diputados, editores de los principales medios de comunicación y otros actores implicados, como plataformas digitales”.

Todavía no está clara la forma definitiva que adoptará el grupo, algo que tendrá que ser debatido por la mesa y portavoces de la comisión de Defensa este próximo martes. El encaje constitucional de la ocurrencia de Cospedal de formar un equipo de trabajo entre diputados y “editores de los principales medios de comunicación” ha generado problemas incluso a los letrados del Congreso, dadas “las especiales circunstancias que concurren en el caso”, explicaron en un posicionamiento escrito al que ha tenido acceso este medio.

En la nota, los letrados dan al grupo “un alto interés objetivo” aunque adelantan que tendrá que ser “un órgano fuera del procedimiento legislativo”. Además, advierten que su carácter “informal” derivará en que “no será posible a priori contar con publicidad de sus trabajos (grabación, transcripción) ni que estos tengan ulterior desarrollo reglamentario”.

“Debe subrayarse en todo caso que se insiste en que la sede donde debe radicar el grupo de trabajo ha de ser la comisión de Defensa del Congreso, y en que al menos haya dos elementos en su composición, a saber, diputados y editores de medios de comunicación”, desarrollan los letrados, basándose en la misiva de Cospedal. En la práctica, la ministra ha conseguido a los editores una línea directa con los diputados para que les hablen de fake news a puerta cerrada.

Los representantes de los grandes grupos mediáticos ya fueron convocados por la UE para que formaran parte del grupo de expertos en desinformación encargado de redactar un informe con recomendaciones para la Comisión Europea sobre cómo actuar en la materia. Además de los editores, en aquellas reuniones participaron profesionales especializados en desmentir bulos, sindicatos de periodistas y representantes de las redes sociales. En un documento conjunto publicado en marzo, aconsejaron a Bruselas “no legislar en caliente” y evitar el uso político del término “noticias falsas” como excusa para censurar contenidos.

Fuentes presentes en las deliberaciones de aquel grupo explicaron a este medio que fue difícil llegar a un mayor consenso dado había “muchos conflictos de intereses” entre sus miembros. Destacaron entonces “los de los grupos mediáticos”, cuyo principal objetivo era lograr una regulación de las plataformas digitales beneficiosa para ellos. “El problema de la desinformación es muy complejo porque tiene muchos factores, entre ellos la crisis de modelo de negocio de los medios tradicionales”, expusieron las mismas fuentes.

Solo Unidos Podemos vota en contra del grupo

PP, PSOE y Ciudadanos votaron a favor de la creación del nuevo grupo de trabajo en el seno de la comisión de Defensa. No obstante, fuentes del partido naranja han señalado a eldiario.es que “el ámbito donde debe abordarse la desinformación en los medios de comunicación no es Defensa” y recuerdan que el general Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD) se ha posicionado en este mismo sentido.

“Esta insistencia por derivar el asunto a Defensa nos suena a intrigas y peleas internas del PP, más que a la defensa de los intereses nacionales y de la seguridad de los ciudadanos”, opina Ciudadanos, que sin embargo considera que “el tema es de bastante importancia” como para dar luz verde al nuevo grupo en Defensa. Desde Unidos Podemos, que votó en contra de la creación del grupo, concuerdan en que “dentro del PP hay dos posiciones respecto a este asunto”, así como que la creación del grupo, que “revela que la ministra Cospedal tiene interés en incluir esta narrativa asociada a la Defensa”, responde a un motivo político.

“Todo se corresponde con la doctrina clásica de la seguridad nacional, que señala como objetivos a los enemigos que amenazan a la patria y el orden internacional. Un enemigo interno (los independentistas catalanes) y un enemigo externo (la Rusia de Putin)”, exponen. El partido morado enlaza esta iniciativa contra las fake news con la “ofensiva mundial para acabar con la libertad y la neutralidad en la red” y avisa del riesgo de que justifique “una ley mordaza 2.0”.

Contactado por este medio, el PSOE ha preferido no posicionarse sobre la creación del grupo de trabajo hasta que este quede oficialmente constituido el próximo martes.