Madrid, 14 dic (EFE).- La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha comenzado a instalar cabinas para que los presos de las cárceles de Madrid VII (Estremera), Madrid IV (Navalcarnero), Brieva (Ávila) y Cáceres puedan hacer videollamadas a familiares y allegados, que podrán ser a cobro revertido.
El pasado 10 de diciembre empezó a ponerse en marcha la fase piloto en esos cuatro centros penitenciarios gracias al acuerdo con una empresa de telefonía, que permitirá sustituir al tradicional sistema de llamadas por este nuevo servicio de forma progresiva, ha informado este lunes prisiones en un comunicado.
La iniciativa se extenderá al resto de cárceles del país durante 2021 y hasta el 6 de enero de ese año, inicialmente, este servicio será gratuito para que los internos puedan comunicarse con el exterior y supondrá una mejora en sus condiciones de vida.
Además, los presos podrán realizar las llamadas a cobro revertido y los familiares tendrán la opción de recargar el saldo para que los reclusos sin recursos puedan hacer uso de las videocabinas.
Otras de las medidas que se comenzarán a implantar es el buzón de voz, a través del cual los familiares podrán dejar mensajes a los presos. Este servicio se realizará de forma controlada para todos los internos por igual.
Durante la pandemia del coronavirus se facilitó el uso de móviles para los internos, pero ahora este servicio quedará reservado exclusivamente para aquellos casos en los que los presos no dispongan de medios económicos, para uso terapéutica o cuando esté autorizado a criterio de la dirección del centro.