“En estos momentos de tristeza y duelo, el Congreso quiere transmitir sus condolencias a sus familiares y allegados y reiterar su firme compromiso en aras de eliminación de todo tipo de violencia ejercida contra las mujeres”. Con estas palabras arrancaba la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, el homenaje en forma de minuto de silencio de la institución a Laura Luelmo, la mujer secuestrada y asesinada en Huelva.
Un homenaje deslucido por la ausencia de la mayoría de los diputados. Apenas una quinta parte de los 350 miembros de la Cámara Baja estuvieron presentes en el arranque del Pleno, momento elegido por Pastor para hacer el minuto de silencio.
A la hora de la votación, varias horas después, la afluencia fue la habitual. Aunque no hubo lleno, 340 diputados estuvieron presentes en el cierre de la sesión del martes del Pleno. Entre ellos, no estaba ninguno de los líderes de los cuatro partidos. ¿Qué ocurrió para que no hubiera una presencia masiva de diputados en el minuto de silencio de Laura Luelmo?
Este miércoles, en la sesión de control al Gobierno en el Congreso, el caso de Laura Luelmo se ha utilizado como arma política. El presidente del PP, Pablo Casado, lo ha esgrimido para exigir al Ejecutivo que no derogue la prisión permanente revisable, mientras Sánchez le ha espetado que dicha medida no ha salvado a la mujer zamorana de nacimiento. La portavoz de Unidos Podemos, Ione Belarra, ha calificado el debate de “absolutamente lamentable”.
Los minutos de silencio u homenajes similares no requieren del acuerdo de los grupos parlamentarios, al contrario de lo que ocurre por ejemplo con las declaraciones institucionales. Hacerlos o no es una discrecionalidad de la presidenta del Congreso, Ana Pastor, informa fuentes oficiales de la institución. Las mismas fuentes aseguran que lo habitual es que la presidenta lo comunique durante las reuniones de la Mesa o de la Junta de Portavoces, que se producen el mismo martes por la mañana.
Los portavoces de Pastor aseguran que esta comunicó a los miembros de la Mesa que se iba a proceder al minuto de silencio. En el órgano de gobierno del Congreso. Las mismas fuentes aseguran que Pastor no informó en la posterior reunión de la Junta de Portavoces.
Desde los grupos, por su parte, aseguran que la comunicación no llegó a los portavoces, encargados de dirigir la actividad de sus diputados. Muchos se enteraron sobre la marcha del homenaje y por la posible sensación de falta de cortesía o desgana que pudieron transmitir los representantes de los españoles ante un asunto tan delicado como la violencia machista.
Ausencia de Gobierno y diputados
El martes estaba convocada una comparecencia extraordinaria del presidente del Gobierno en el Senado. Ningún miembro del Ejecutivo de Pedro Sánchez estuvo así presente en un Pleno al que no tienen obligación de asistir: los ministros de este Gobierno no son diputados, una novedad en la política española. Muchos periodistas que habitualmente cubren la información parlamentaria estaban también esa tarde en la Cámara Alta.
¿Y los diputados? En jornadas como la de este martes, de baja intensidad, muchos aprovechan las largas horas de Pleno para hacer lo que se denomina “trabajo de despacho”: reuniones internas, preparar intervenciones, debatir los trabajos legislativos con diputados del propio grupo o de otros...
Los diferentes grupos consultados por eldiario.es aseguran que los diputados no tenían conocimiento de que se fuera a producir el homenaje a Luelmo y no atinan a explicar en qué momento se cortó el hilo informativo entre la decisión de la presidenta y las direcciones parlamentarias.
Pastor ha optado durante su mandato por hacer estos homenajes al inicio del Pleno. En legislaturas anteriores, otros presidentes decidieron convocarlos al inicio de las votaciones, cuando la afluencia de los diputados es siempre más numerosa.