La portada de mañana
Acceder
Feijóo pide que el Gobierno asuma la gestión de la DANA mientras Mazón se resiste
El esfuerzo colectivo para no dejar nada sin rastrear en el parking de Bonaire
Opinión - Feijóo entierra a Mazón. Por Esther Palomera

Siete detenidos por agresiones fascistas en el noroeste de Madrid

La Guardia Civil ha desarrollado una operación en las últimas horas contra un grupúsculo de ideología neonazi ubicado en el noroeste de Madrid. Según avanzaron a eldiario.es fuentes próximas a la investigación, ayer fueron detenidos seis jóvenes presuntamente implicados en agresiones cometidas el pasado mes de agosto en la localidad de Majadahonda, al que se ha sumado un séptimo arrestado en las últimas horas.

Los detenidos tienen entre 19 y 23 años y presuntamente habrían participado en dos agresiones cometidas los días 2 y 4 de agosto, una a las puertas de un local de copas de la localidad y la otra frente a una tienda de 24 horas. La investigación ha sido desarrollada por el Servicio de Información de la Guardia Civil de la Comandancia de Madrid, con sede en Las Rozas, localidad limítrofe con Majadahonda. Los agentes pusieron a los detenidos esta mañana a disposición del Juzgado de Instrucción número 8 de Majadahonda, cuya titular les tomó declaración y decretó libertad con cargos, informaron fuentes jurídicas.

Los detenidos han sido acusados de un delito de pertenencia a grupo criminal, lo que no implica necesariamente su adscripción a una organización sino simplemente que actuaban de forma conjunta y tenían un cabecilla. Este ingresó en prisión después de haber participado en la agresión a un mendigo, que fue arrojado a una hoguera. Todos los detenidos tienen estética neonazi o ‘skin head’ de ultraderecha. También están acusados de un delito contra las libertades recogido en el artículo 510 del Código Penal, según las mismas fuentes. Dicho artículo, en su punto primero, castiga con penas de uno a tres años y multa de seis a doce meses a “los que provocaren a la discriminación, al odio o la violencia” por motivos de ideología, religión, raza u orientación sexual, entre otros. También se les atribuye amenazas graves y lesiones.

Los detenidos eran bastante activos en Internet, donde difundían su mensaje de odio.Tras la información de eldiario.es, la Comandancia de la Guardia Civil difundió una nota de prensa calificando al grupo desarticulado de “antisistema vinculado a la extrema derecha”.

El noroeste de Madrid y más concretamente las localidades de Majadahonda y Las Rozas han sido en el pasado escenario de agresiones de corte fascista. Por eso, cuando se produjeron los dos sucesos de principios de agosto, el portavoz socialista en Majadahonda, Borja Cabezón, trasladó al Ayuntamiento su preocupación y solicitó de forma urgente información a la concejalía de Seguridad de la localidad. A raíz de eso, arrancó la investigación. En estas fechas se celebran las fiestas patronales de la localidad, por lo que la operación de la Guardia Civil ha evitado posibles incidentes protagonizados por los detenidos.

Estas seis detenciones de individuos de la ultraderecha se suman a las 12 practicadas por la Policía el pasado 12 de septiembre tras el asalto a la librería Blanquerna, del centro de Madrid, durante un acto con motivo de la Diada. Según expertos consultados por esta redacción, ambas operaciones permiten un aproximamiento a dos de los grandes segmentos de la ultraderecha madrileña. Por una parte, militantes de pequeños partidos que evitan mezclarse en delitos, como es el caso de los asaltantes a Blanquerna, la mayoría sin antecedentes y líderes de partidos políticos legalizados –a excepción de Iñigo Pérez de Herrasti, en prisión 14 años por tenencia de armas y explosivos-. Y por la otra, el ejemplo de Majadahonda, jóvenes neonazis que suelen salir “de caza” en busca de cualquiera que consideren enemigo ideológico y que no suelen militar en una formación.

Según publicó eldiario.es, la agresión en Blanquerna, en la que participaron elementos de La Falange, Democracia Nacional y Alianza Nacional, se enmcarca dentro de una iniciativa denominada 'La España en Marcha', que arrancó con la emisión de un manifiesto conjunto con la intención de presentar una candidatura única a próximas elecciones y mejorar así los irrelevantes resultados obtenidos en el pasado.