Pablo Iglesias vs. Íñigo Errejón: diferencias y semejanzas en sus primeras entrevistas de campaña

Pablo Iglesias e Íñigo Errejón ya no son amigos. Apenas hablan entre ellos desde la ruptura del pasado mes de enero, según han reconocido ambos públicamente este miércoles en varias entrevistas: Iglesias en Telecinco y Errejón en la Cadena Ser y Carne Cruda. Pero el próximo 10 de noviembre, ambos competirán en la repetición electoral.

Iglesias repite como candidato de Unidas Podemos después de que las negociaciones fracasaran con el PSOE y su partido se negase a facilitar un gobierno en el que no hubiera miembros de su formación. Errejón, en cambio, se estrena al frente de Más País y se presenta como la fuerza política que combatirá la abstención tras el descontento que la nueva cita electoral ha provocado en una parte del electorado de izquierdas.

De momento, se desconocen cuáles serán las estrategias y discursos de campaña de los partidos. Pero los candidatos que un día compartieron proyecto político, sí han definido en sus primeras entrevistas algunas diferencias, y similitudes, en temas que centrarán la campaña, como Catalunya o los pactos postelectorales.

Programa

“Ir a unas elecciones sin programa es un poco raro”. La frase es de Pablo Iglesias este miércoles en Telecinco y ataca uno de los puntos débiles que tiene ahora mismo Más País. La premura de los plazos ante la repetición electoral ha llevado a los de Íñigo Errejón a primar la formación de listas a la redacción del decálogo con el que se presentarán el 10N.

En la Cadena Ser primero y en Carne Cruda después, Errejón reconocía que a día de hoy Más País no tiene programa electoral, aunque le restaba importancia: “A una fuerza que se lanza el miércoles pasado es irresponsable pedirle que tenga ya un programa”, decía. Y añadía que “el problema en España no ha sido el programa”, en referencia a la investidura fallida. “Si las propuestas no se convierten en leyes, el programa se convierten en papel mojado”, criticaba en Carne Cruda.

El líder de Más País ha defendido que la causa de la repetición electoral no fueron las diferencias programáticas entre las formaciones progresistas, sino que primaron “las necesidades de partido sobre las necesidades de la gente”. “A mí nadie me ha explicado cuál es la principal diferencia programática por la que las fuerzas progresistas no han podido ponerse de acuerdo y vamos a elecciones”, ha incidido.

Para Unidas Podemos, en cambio, el programa es clave. Y sí creen que tuvo que ver con el fiasco en las negociaciones para un Gobierno con el PSOE. Tanto, que en la entrevista en El Programa de Ana Rosa, Iglesias dijo: “esto no va de regalar gobiernos, sino de decirle a la gente qué vamos a hacer después”.

Iglesias ha planteado tres cuestiones programáticas básicas: intervenir el mercado de la vivienda para bajar el precio del alquiler; crear una empresa pública de energía para rebajar la factura y poner en marcha la transición ecológica, y aplicar una reforma fiscal que suba los impuestos “a los de arriba” ante la posibilidad de una nueva crisis económica.

Por su parte, Errejón ha asegurado que en su formación aspiran a “ser herederos de toda una larga trayectoria verde” que está teniendo “mucho peso político en Europa”. En cuanto a los acuerdos que pueda llegar con las demás fuerzas progresistas para formar gobierno si dan los números tras el 10N, el candidato de Más País ha asegurado su formación trabajará por un pacto “que satisfaga una parte de las voluntades de transformación en un sentido de justicia social, ecología y feminismo en España”.

¿Qué tipo de Gobierno tras el 10N? ¿Coalición? ¿Gratis?

Unidas Podemos va a insistir en la campaña del 10 de noviembre en su idea de un Gobierno de coalición si el resultado depara una “mayoría progresista”. En Telecinco, lo volvía a repetir y recuperaba uno de los mantras de la campaña de abril al pedir un Gobierno de coalición “proporcional a los votos”. Pablo Iglesias cree que es la única forma de que se cumplan los acuerdos. Y pone como ejemplo lo ocurrido tras la moción de censura: “Hicimos un Gobierno a la portuguesa y fracasó”.

En las negociaciones incluye a Más País, si la formación quisiera formar parte de dicho Ejecutivo. Errejón ya manifestó el día que anunció su candidatura que Más País “estará al servicio de un gobierno progresista” y no solo se abre a negociar con Unidas Podemos sino que se ofrece como “pegamento”.

En cuanto al Gobierno de coalición, el candidato de Más País discrepa con Iglesias en que sea la única forma de garantizar acuerdos: “Es verdad que tener un acuerdo de medidas no garantiza que esas medidas se cumplan, pero tampoco tener tres ministros lo hace porque un ministro está subordinado a lo que diga el presidente”. “Un gobierno de coalición es un tira y afloja entre que cada una de las formaciones que lo forman y que intentan tirar hacia su lado, pero eso también se puede hacer desde el Parlamento”, incidía Errejón en Carne Cruda.

Negativa a incluir a PP o Cs en un pacto tras el 10N

Tanto en Unidas Podemos como en Más País rechazan de entrada una hipotética negociación tras el 10N que incluya a Ciudadanos o al PP. En el caso de Pablo Iglesias, la relación con el partido de Albert Rivera es muy mala y ya durante la campaña del 28A, y sobre todo después, ha acusado a Pedro Sánchez de buscar un acuerdo “con la derecha”, en referencia a los mensajes que diferentes dirigentes del PSOE han lanzado en estos meses pidiendo a Rivera que se abriera a pactar con ellos.

Errejón, que se ofreció a facilitar un gobierno entre los socialistas y los de Rivera en la Comunidad de Madrid tras las elecciones autonómicas del 26 de mayo para evitar que gobernase el PP, descarta que sus votos puedan sumar a un acuerdo entre PSOE y Ciudadanos en el Congreso de los Diputados. El líder de Más País no lo apoyaría por la decisión de los de Rivera de pactar con Vox en Madrid: “Nosotros no queremos que se conforme un gobierno con Ciudadanos porque Albert Rivera ha elegido competir en el radicalismo de derecha con el señor Abascal”, aseguraba en Carne Cruda.

La aplicación del 155

La posición sobre Catalunya es uno de los hándicap que tendrán ambos partidos durante la campaña. La posible aplicación del artículo 155 y la detención de varios independentistas acusados de terrorismo serán uno de los ejes centrales de la campaña, como ya ocurriera por ejemplo en las andaluzas que propiciaron la irrupción de Vox.

Podemos ha defendido desde siempre que un referéndum pactado que incluyera todas las opciones es la única solución al problema catalán. De hecho, la “plurinacionalidad” fue una de las señas de identidad en el nacimiento del partido, que luego se trasladó al Congreso en forma de “grupo confederal”. Tras las elecciones del 28A, la cuestión catalana también tuvo su papel en las negociaciones entre Unidas Podemos y el PSOE. Iglesias reconoció en público que los socialistas, como partido más votado, debería marcar la línea política sobre Catalunya. Incluso, se comprometió a dejar por escrito que no se apartaría de lo que se decidiera en el Consejo de Ministros.

Una idea que ha repetido ahora. El pasado viernes, en una entrevista en Antena 3, respondió ante la pregunta de si aceptaría la aplicación del 155: “Claramente, nosotros ya hemos dicho que aunque teníamos una posición de diálogo, vamos a aceptar la ley y la posición de liderazgo del PSOE”. Luego matizó que en UP no creen que recurrir al precepto constitucional solucione el conflicto, como ya se demostró, dicen, en 2017.

En el caso de Errejón, el líder de Más País ha defendido que una hipotética aplicación del 155 no condicionará su apoyo a un Gobierno progresista, aunque no esté de acuerdo. “Nosotros no le acompañaríamos en esa decisión, pero al mismo tiempo no habría que hipotecar un gobierno progresista por esa decisión”, ha explicado en su entrevista en la Cadena Ser, en la que ha señalado que no ve motivos para suspender la autonomía de Cataluña porque haya desorden público. “Los ha habido muchas veces en España y eso no es motivo”, ha justificado.

La culpa del fracaso de la investidura

“Qué irresponsabilidad”. El tuit que Íñigo Errejón publicó cuando la repetición electoral ya era un hecho daba pistas sobre sus intenciones ante el 10N. Y también sobre a quién considera culpables: a Pedro Sánchez y a Pablo Iglesias casi a partes iguales.

En Unidas Podemos, lógicamente, cargan las tintas exlusivamente en el PSOE. Pablo Iglesias sostiene que la frase en la que Pedro Sánchez dijo que “no dormiría” con dirigentes de Podemos en determinados ministerios es la prueba de que nunca quiso explorar una coalición. “Sánchez dijo lo que pensaba y ya todos los españoles saben por qué no hay un Gobierno en España”, señaló este martes en Telecinco.

Para Errejón que llega a estas elecciones sin cargas porque es un actor nuevo en el tablero electoral, la responsabilidad es compartida entre PSOE y Unidas Podemos–“cuando dos no se entienden siempre hay culpas en los dos lados”–, pero es mayor la de Pedro Sánchez porque “tiene más quien tiene más poder”.

Sin embargo, a juicio de Errejón, aunque Sánchez se equivocó ofreciendo un gobierno y retirándolo “tres semanas después”, considera que Unidas Podemos debería haber llegado a un acuerdo programático con Sánchez aunque eso supusiera no entrar en el gobierno. “Entre la opción de volver a elecciones y la opción de desbloquear llegando a un acuerdo programático e intentarlo después, yo habría preferido la opción de desbloquear”, ha defendido el candidato de Más País.