El director del CNI, Félix Sanz Roldán, ha ratificado hoy ante el juez la denuncia que presentó la Fiscalía contra el excomisario José Villarejo por injurias y calumnias “en defensa” de todos los trabajadores de los servicios de inteligencia que él dirige, a los que considera perjudicados.
El Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid había citado hoy como testigo al director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en la causa que investiga al excomisario José Villarejo por una denuncia que presentó la Fiscalía por un delito de injurias y calumnias y otro de revelación de secretos.
El Ministerio Público y la Abogacía del Estado, que se ha adherido a la denuncia, han actuado contra Villarejo en respuesta a la querella que éste presentó contra Sanz Roldán en la que le acusaba de filtrar a los medios una fotografía suya y a las acusaciones que vertió contra el CNI y su director en una entrevista que concedió al programa Salvados.
La denuncia de la Fiscalía considera al director de los servicios de inteligencia el perjudicado de estos delitos, toda vez que la querella que presentó el excomisario contra él por esa supuesta filtración quedó finalmente archivada.
Según ha expresado Sanz Roldán en declaraciones a los medios a la salida del Juzgado, durante su comparecencia, que ha durado apenas veinte minutos, ha ratificado la denuncia en nombre de todos los trabajadores del CNI, de los que se considera “responsable” ante las ofensas del excomisario, que los llamó “delincuentes”. También ha contestado a todas las preguntas de las partes, que han sido “muy generales”, de modo que no han comprometido su deber de proteger aquella información que sea objeto de secreto de Estado.
Ha expresado Sanz Roldán que es su deber responder por los más de 3.000 trabajadores del CNI que, por su condición, no pueden defenderse y por lo tanto, esta no es una denuncia en la que él reclame su derecho al honor, sino que lo considera como un ejercicio de “defensa” del órgano que dirige.
La Abogacía del Estado estudia interponer otra denuncia contra Villarejo por un delito de acusación y denuncia falsa para fortalecer la acusación. Esto es porque, tal y como ha dictaminado la Audiencia Provincial de Madrid al absolver al pequeño Nicolás de injurias y calumnias al CNI, ese organismo no puede ser objeto de un delito de esas características porque es un organismo público y no pertenece a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Según fuentes jurídicas, la razón por la que se acusa al excomisario de un delito de revelación de secretos en esta misma causa es por las declaraciones que hizo en el programa Salvados de La Sexta, en el que relevó datos de carácter restringido a los que tuvo acceso en su condición de funcionario público. Al respecto, Sanz Roldán ha manifestado hoy que él no presentó una denuncia por ello, pero sí remitió a la Fiscalía el programa de televisión para que estudiara el contenido de las declaraciones, y fue el Ministerio Público el que decidió actuar contra el excomisario.
El juez había citado también a Villarejo para declarar hoy en calidad de investigado, pero esta comparecencia se suspendió por razones médicas. Finalmente, el juez ha decidido que el excomisario declare por videoconferencia desde la prisión en la que se encuentra desde noviembre como resultado de la operación Tándem, aunque no se prevé que esto ocurra antes del mes de octubre.