La equiparación de los permisos de paternidad, primera oportunidad para la sintonía entre el Gobierno y Unidos Podemos

  • El presidente no concreta hasta dónde está dispuesto a llegar pero pide a los grupos negociar para terminar con la discriminación laboral por género

Pedro Sánchez está decidido a agotar la legislatura. Dos años de un Gobierno con un exiguo apoyo parlamentario. El menor que ha tenido un presidente desde la restauración de la democracia tras la dictadura militar. El PSOE tiene 84 diputados en el Congreso y tendrá que articular acuerdos para garantizarse una cierta estabilidad. El PNV ya ha comprometido su siempre importante respaldo. El de los 67 diputados de Unidos Podemos dependerá de la “agenda social” del Gobierno de Sánchez. La primera medida que pondrá a prueba la buena, o mala, sintonía está ya sobre la mesa: la equiparación de los permisos de maternidad y paternidad.

La reivindicación forma parte del histórico de proposiciones presentadas por el grupo confederal en el Congreso. El PSOE también defiende que se igualen los permisos y se hagan intransferibles. La diferencia entre las propuestas es que la de los socialistas aboga por que los permisos sean inmediatamente posteriores al nacimiento o la adopción mientras que la de Unidos Podemos los permite en el primer año.

La primera vez que Unidos Podemos registró su propuesta fue vetada por el Gobierno de Mariano Rajoy con la excusa de que supondría un aumento del gasto de los presupuestos futuros. El Tribunal Constitucional señaló en una reciente sentencia que el Ejecutivo no puede llevar su potestad de vetar el debate de una proposición de ley en las Cortes Generales al extremo de impedir que se discutan y aprueben normas que afecten a los gastos de ejercicios presupuestarios posteriores. Y Unidos Podemos volvió a registrar la proposición de ley, que consiste, grosso modo, en que ambos progenitores puedan gozar del mismo permiso y que una parte de él sea intransferible.

La admisión a trámite de la propuesta se debatirá y votará en el Pleno de la semana que viene, según ha anunciado este mismo martes la portavoz del grupo confederal, Irene Montero. Si la mayoría de la Cámara se pronuncia a favor comenzará una larga tramitación parlamentaria paralela a la negociación de los presupuestos que tienen que financiar su implantación, en caso de aprobarse definitivamente.

Reunión y pregunta en la sesión de control

Pero el Gobierno tendrá la oportunidad de pronunciarse al respecto mucho antes. Este mismo miércoles. El presidente se someterá a su primera sesión de control en el Congreso. La casualidad ha hecho que a Pablo Iglesias le toque preguntar a Pedro Sánchez. Y el líder de Unidos Podemos ha elegido la equiparación como primera cuestión.

“¿Está dispuesto su Gobierno a impulsar permisos de maternidad y paternidad iguales, intransferibles y remunerados al cien por cien?”, reza la pregunta que hará el secretario general de Podemos al presidente.

El presidente del Gobierno ha optado por no concretar su apoyo a esta propuesta. Sánchez, en su respuesta a Iglesias, ha recordado que “hay dos iniciativas legislativas en la Cámara” que recogen este asunto y ha animado a los grupos a hacer “las mejores leyes entre todos para acabar con una de las peores lacras, la discriminación por género en el ámbito laboral”.

Sánchez ha hablado de “intransferibilidad” de los permisos y de una “remuneración adecuada”, sin dar más detalles. La concreción de las posiciones de partida quedan así para la semana que viene, cuando se debate la proposición de ley de Unidos Podemos.

Iglesias, por su parte, le ha pedido a Sánchez su apoyo para convertir en ley una reivindicación histórica del feminismo. “Las mujeres de este país se lo han ganado”, ha señalado en referencia a las movilizaciones del 8 de marzo.

“No les ponemos deberes, se los ponen las mujeres de este país y la gente que empujó y apostó por una moción de censura”, ha concluido.

Ya en los pasillos del Congreso, Iglesias ha advertido ante los medios de comunicación: “Esperamos que el Gobierno acepte nuestra proposición de ley en sus términos”.

Negociación constante

La equiparación de los permisos forma parte del paquete de 20 medidas que Iglesias ha planteado a Sánchez como base de un acuerdo parlamentario que garantice al PSOE un apoyo parlamentario cercano a los 160 diputados, cerca de los 176 que marcan la frontera de la mayoría absoluta.

Iglesias anunció este paquete legislativo ante su Consejo Ciudadano el pasado viernes. Un día antes se había visto, en secreto, con el propio Sánchez en el Palacio de la Moncloa. En la reunión abordaron “qué leyes se pueden sacar adelante en esta legislatura”, según confirmaron a eldiario.es fuentes gubernamentales.

La de Iglesias no fue la primera reunión que mantuvo Sánchez. Un día antes lo hizo con el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, quien le ofreció un “compromiso de estabilidad”.

A Pedro Sánchez, a su Gobierno y al grupo que comanda Adriana Lastra le quedan por delante dos años de negociación constante si quiere agotar la legislatura, como señaló el lunes en una entrevista en TVE.

El lunes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Coordinación de Podemos, la portavoz de la ejecutiva, Noelia Vera, apuntó a que se abre un nuevo tiempo en la relación de su partido y el PSOE, con una relación “práctica, sostenible y estable”.

Pero ambos partidos rechazan convertir al otro en “socio preferente”. La experiencia previa desaconseja lanzar las campanas al vuelo, aunque la elección que Sánchez ha hecho para la portavocía de su grupo indica que sí tiene interés en mejorar las relaciones con Unidos Podemos, después de la mala relación que hubo entre Margarita Robles e Irene Montero.

Lastra, en la habitual rueda de prensa de los martes en el Congreso, señalaba que su grupo tiene “la mano tendida a todos los grupos”. “Hay algunos que responden con mejores maneras que otros. Unidos Podemos nos ofrece un acuerdo parlamentario basado en 20 puntos. Lo analizaremos”.

La portavoz de Unidos Podemos, por su parte, dejaba claro en su turno el papel que, creen, tendrá el grupo en esta nueva etapa. “Al PSOE le cuesta mucho tomar decisiones”, apuntaba. “Nuestra misión es acompañar al PSOE. Intentar convencerlos”, añadía. “Ayudar a que vean que es posible incluso aquellas cosas que hoy ven imposibles”, señalaba. “Pedro Sánchez tiene una deuda democrática con la España del cambio”, zanjaba.

El candidato de Podemos a la Comunidad de Madrid, Íñígo Errejón, lo expresaba de manera similar en una entrevista con eldiario.es: “Podemos tiene que ser una fuerza que respalde, sostenga y empuje a este Gobierno”.

La idea es negociar las medidas una a una. Si la reforma laboral no sale, se intenta con la revalorzación de las pensiones. O la subida del SMI. O la derogación de la ley mordaza.

“Esas medidas son urgentes, necesarias y las vamos a pelear con uñas y dientes”, aseguraba Montero ante los periodistas. Pero la primera prueba, la equiparación de los permisos de paternidad y maternidad, sí la ven cerca: “No me cabe duda de que el PSOE y el Gobierno van a estar comprometidos con su admisión a trámite”.