Mientras espera saber si es imputada en una nueva causa, esta vez por su gestión de los hospitales de Madrid, Esperanza Aguirre sigue dando lecciones sobre qué dirección debe tomar la política, y en concreto la derecha. Durante una conferencia organizada por la Universidad CEU San Pablo volvió a mostrar su apoyo a la actual presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, en el conflicto que tiene abierto contra la dirección del PP, y criticó la estrategia política del líder de los populares: “Casado se está equivocando, espero que rectifique y no escuche los cantos de sirena”.
Aguirre estaba invitada este jueves a una charla denominada “Una propuesta para España”, del Instituto de Estudios para la Democracia del CEU, pero comenzó diciendo que no iba a ser tan ambiciosa. Su propuesta iba a ser solo para la derecha política, a quien recomendó dar “la batalla cultural” contra la “religión 'woke'”. “El establishment ideológico dominante es de izquierdas y algunos le tienen miedo”, añadió.
La expresidenta madrileña hizo un discurso contra el movimiento trans que “colectiviza” a las personas, criticó el movimiento ecologista y la ley de violencia de género, así como las políticas de discriminación positiva. Ya en el turno de preguntas dijo sentirse cercana a Vox, con quien aclaró que coincidía en muchos aspectos, y a quien agradeció su colaboración con el Gobierno regional.
Fue ya en ese turno de preguntas cuando, aunque dijo que no estaba allí para eso, deslizó algunas críticas contra Casado y la actual dirección del PP. Dijo que esperaba que Casado recuperase la batalla cultural contra la izquierda, como estaba haciendo Ayuso desde que eligió como lema “Comunismo o libertad”. Recordó que fue una de las banderas del ahora líder popular en su campaña en las primarias del PP, y lamentó que quien mejor había dado hasta ahora esa pelea, Cayetana Álvarez de Toledo, estuviera enfrentada a Génova.
También tuvo tiempo para insistir en la importancia de lo que ha hecho Ayuso, que sacó al PP “de la depresión y el desánimo” en el que se sumió tras las elecciones catalanas, le devolvió la moral, le catapultó a en las encuestas y por el camino “retiró a Iglesias, líder del neocomunismo bolivariano”. Es en ese escenario político donde, dice, Génova tuvo una reacción “incomprensible” y no entendió “los beneficios de estar unidos”.
Y ese mensaje no iba solo por la batalla interna con Ayuso o con Álvarez de Toledo, a quien mencionó en un par de ocasiones, sino también en la relación con Vox. Aguirre incluyó entre las equivocaciones de Casado que debe rectificar su tono hacia Santiago Abascal en la moción de censura, donde recordó que le dijo que el PP le había “mantenido” durante muchos años: “No es Casado el más indicado para hablar de esto”.