La exdirectora de Comunicación de la Comunidad de Madrid bajo las presidencias de Esperanza Aguirre e Ignacio González, Isabel Gallego, ha revelado al juez de la Audiencia Nacional que investiga el caso Púnica, Manuel García Castellón, pagos a través de contratos de publicidad del Canal de Isabel II a la empresa EICO. Ésta empresa, que pertenece al informático Alejandro de Pedro, recibía los pagos a cambio de trabajos de reputación online de los dos expresidentes.
En un escrito que envió ayer Gallego al titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, coincidiendo con su declaración en la Audiencia Nacional, la exdirectora de Comunicación ha explicado que fue en marzo o abril de 2012 cuando Borja Sarasola, entonces viceconsejero de la Vicepresidencia de la región y 'número tres' del PP de Madrid, le habló de la empresa de De Pedro para atender las redes sociales.
Gallego ha reconocido que los contactos con De Pedro comenzaron entonces, cuando ella trabajaba para Aguirre, la cual dimitió pocos meses después, en septiembre de 2012. Por eso, cree que la empresa de De Pedro “no hizo ni un solo trabajo para Aguirre”, ya que “la actividad comienza precisamente tras su dimisión”. Esperanza Aguirre fue sucedida en el cargo por Ignacio González, quien situó a Sarasola al frente de la Consejería de Medio Ambiente.
Según el escrito de la exdirectora de Comunicación, Sarasola pactó desde el principio con De Pedro “la oferta económica de los trabajos reputacionales de Aguirre y González, así como los métodos de pago, que pasaban por adjudicatarias del Canal de Isabel II”.
Esto se hizo así, añade Gallego, hasta que Sarasola fue ascendido a consejero. Tras el cambio, “se apartó de la gestión de los pagos”. “El contrato de publicidad del Canal, a través del cual se le pagaba, finaliza y De Pedro se queda sin vía para cobrar los trabajos que sigue haciendo para Ignacio González”, explica.
Tras la marcha de Sarasola a Medio Ambiente, Salvador Victoria ocupó la Consejería de Presidencia con Ignacio González ya como dirigente madrileño, y “copió el modelo” para pagar a De Pedro. Sin embargo, “tropezó con problemas de tramitación en el concurso de publicidad del Canal” y, por tanto, “descartó esa vía”.
Gallego admite que en aquel momento Victoria recurrió a ella para “proponer una solución de pago permanente” para De Pedro a través del abono de “facturas de gastos menores” desde su Dirección General. “No fue un contrato, sino el pago de gastos menores, una solución en principio provisional para que éste vaya facturando los trabajos que está llevando a cabo”, apunta.
Así, Gallego explica en su escrito que desde su Dirección General se pagaron a De Pedro 21.000 euros en el año 2012, facturas mensuales de 1.800 euros en el año 2013 y cuatro más en 2014 con un total de 7.200 euros.
Según Gallego, De Pedro reclama una deuda de 100.000 euros que “no genera en absoluto la Dirección General de Medios de Comunicación”. De hecho, asegura que el propio De Pedro le dijo a ella que le debían 40.000 euros. Y en cualquier caso, ella asegura que le derivó a Sarasola porque no tenía “ni idea de lo que ha negociado, ni cómo”.
Fue Salvador Victoria, añade Gallego, el que decidió establecer pagos paralelos utilizando a Indra mientras buscaba otra solución dentro del Canal de Isabel II para volver a abonar las facturas a De Pedro desde ahí.