Feijóo dice que España “acepta por razones económicas y políticas que una dictadura se imponga a una democracia”

“Vivimos en un país donde la democracia solo se persigue en determinados lugares (sic), y en otros se acepta por razones ideológicas, económicas y políticas que una dictadura se imponga a una democracia”. Así ha criticado este lunes Alberto Núñez Feijóo la supuesta connivencia de España con regímenes como el venezolano. La semana pasada, el líder del PP arremetió contra “una creciente rivalidad, por un lado entre Occidente, el mundo libre y democrático y por otro, el modelo chino ruso apoyado por Irán o Corea del Norte”. Todo, días después de que el presidente del Gobierno viajara a China. Una semana antes lo hizo el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno. Y el propio Feijóo en 2017, cuando estaba al frente de la Xunta de Galicia.

Feijóo ha arremetido contra el Gobierno de Pedro Sánchez por no informar al PP sobre la situación de los dos españoles detenidos en Venezuela acusados de formar parte de un complot para atentar contra el presidente Nicolás Maduro. “Tanto mi partido como yo seguimos con absoluta preocupación la detención de dos compatriotas”, ha dicho en declaraciones a los medios durante un acto en una escuela infantil en Alicante.

Pero Feijóo ha lamentado “no poder decir nada más” porque “48 horas” después de conocerse la detención, “el principal partido de España no tiene información por parte del Gobierno”. “No nos han informado desde cuándo están detenidos ni de qué se les acusa, cuáles son sus condiciones personales, dónde están retenidos ni sus condiciones de habitabilidad”, ha señalado.

“Es lamentable la falta de información del Gobierno sobre la detención y sobre las negociaciones con el régimen de Maduro para dar asilo al que ha ganado las elecciones”, ha dicho, en referencia al opositor Edmundo González, a quien España ha dado asilo político tras solicitarlo él mismo.

Feijóo no se ha referido a González por su nombre en ninguna de las dos ocasiones en las que ha hablado de él. La segunda, para anunciar una reunión con él, después de que ya se haya entrevistado con Pedro Sánchez y con los expresidentes Mariano Rajoy (el viernes) y José María Aznar (este mismo lunes). “Mañana recibiré al que ha ganado las elecciones en Venezuela. Lo voy a recibir en el Congreso, donde reside la representación de la soberanía de nuestro país, en la misma Cámara que le ha reconocido como presidente de Venezuela”, ha señalado. “Espero que mañana el Parlamento Europeo vote en conciencia para respetar los derechos del pueblo venezolano adquiridos en las urnas”, ha añadido, en referencia a la votación que se celebrará el próximo jueves.

La defensa de las democracias

Feijóo ha pedido en las últimas semanas que España reconozca a González como presidente electo de Venezuela, después de que diversos organismos internacionales y países latinoamericanos de diferente signo político haya denunciado un posible fraude en las elecciones del pasado mes de julio.

De momento España no ha dado el paso que reclama el PP, como tampoco ningún país de Europa: desde los gobernados por el PPE a los socialistas los liberales o la ultraderecha. La UE como organismo supranacional no ha reconocido a Edmundo González como presidente electo. Ni siquiera EE UU lo ha hecho.

La frase de Feijóo sobre la connivencia de las democracias con las dictaduras por motivos “ideológicos, económicos y políticos” se completa con otra que pronunció él mismo el pasado viernes durante una visita al primer ministro Kyriakos Mitsotakis. En Atenas dijo: “Probablemente Europa está en la situación más difícil desde la Segunda Guerra Mundial. Existe una creciente rivalidad entre Occidente, el mundo libre y democrático, y por otro, el modelo chino-ruso apoyado por Irán o Corea del Norte”.

Un día antes había regresado Pedro Sánchez de un viaje oficial a China. Pero no solo el presidente del Gobierno ha acudido este año al país asiático. El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, visitó China unos días antes que Sánchez. El líder andaluz presumió de haberse traído compromisos de inversión industrial en su región por valor de 2.500 millones de euros.

Pero es que el propio Feijóo visitó China en un viaje oficial como presidente de la Xunta de Galicia. Fue en 2017, y su agenda estuvo copada de encuentros con empresarios chinos con la intención de negociar inversiones en la comunidad autónoma que por entonces lideraba.