Los expresidentes del Gobierno Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero respaldarán con su firma la petición de indulto que solicitará próximamente la familia de José Antonio Griñán ante el Ministerio de Justicia, después de que el Supremo confirmara el mes pasado la condena al expresidente de la Junta de Andalucía por el caso de los ERE, según ha avanzado El Confidencial.
De acuerdo con la información del digital, la esposa de Griñán, María Teresa Caravaca, y su hijo Manuel registrarán la petición en cuanto se conozca la sentencia completa del Alto Tribunal, que ratificó para el expresidente andaluz una condena a seis años de prisión e inhabilitación especial por malversación y prevaricación en esa trama.
La solicitud de la medida de gracia “por motivos de humanidad y equidad” irá acompañada de un anexo de firmas que encabezarán, según el diario, tanto González como Zapatero, y que incluirá la rúbrica de varios ministros de sus respectivos gobiernos. Fuentes cercanas al expresidente Zapatero han confirmado a elDiario.es que “apoya la petición de indulto” y que la suscribirá “cuando llegue ”el momento procesal oportuno“.
El Supremo confirmó “por mayoría” en una decisión hecha pública el 26 de julio las condenas de los dos expresidentes de la Junta de Andalucía José Antonio Griñán y Manuel Chaves por su participación en el caso de los ERE de esa comunidad autónoma. En el caso de Chaves, los jueces de la sala de lo penal confirmaron su condena de nueve años de inhabilitación y en el de Griñán de seis años de prisión, lo que supone su entrada en prisión.
El tribunal estimaba así tres recursos de casación y parcialmente uno más y desestimaba todos los demás, incluidos los de Chaves y Griñán. Por este motivo, el Tribunal Supremo ha acordado anular la sentencia en primera instancia y redactar una nueva que se conocerá próximamente, cuando esté redactado el voto discrepante. Será en ese momento cuando la familia del también exministro registre la solicitud de indulto con el objetivo de evitar su entrada en prisión.
En 2019, la Audiencia de Sevilla declaró probado que en los años noventa la Junta de Andalucía y su Consejería de Empleo pusieron en marcha un sistema de ayudas de dinero público para las empresas que contratasen a trabajadores con una edad cercana a la jubilación y también a empresas en crisis.
Un sistema que se extendió entre los años 2000 y 2009 y que siguió adelante a pesar de los múltiples reparos, entre otros, de la Intervención de la Junta de Andalucía. Estos millones de euros se canalizaban de manera irregular a través del Instituto de Fomento de Andalucía (IFA) valiéndose de modificaciones presupuestarias igualmente irregulares y evitando la mayoría de los controles y filtros de la administración para enviar el dinero lo más rápido posible a las empresas y trabajadores.
“Intachable trayectoria vital”
El documento que ha preparado la familia, de once páginas, califica sin embargo de “desafortunada ironía” la condena por malversación toda vez que “durante toda su vida ha hecho precisamente de la honestidad profesional y económica su principal valor” y defiende que el patrimonio del político es “limpio y ajustado al propio del servidor público”. La familia destaca su “intachable trayectoria vital caracterizada por su lucha por la democracia”. En el texto, incluyen de hecho sus cuentas y propiedades y anotan que es “público y notorio” que tras haber ocupado los más altos cargos del Estado “su patrimonio acredita por sí mismo la limpia ejecutoria de un servidor ejemplar”.
Otro de los argumentos que el texto aduce para solicitar la medida ante Justicia es el hecho de que la sentencia no fuese redactada de forma unánime sino por una mayoría de tres votos a favor y dos en contra. “Es la primera vez en la historia que un caso de esta envergadura (...) se resuelve por tan exiguo margen”, sostienen.
González defendió su “intachable integridad moral”
El expresidente González ya mostró días después de conocer la decisión del Supremo su “perplejidad y dolor” por el contenido del fallo y defendió en un comunicado a quien fuera ministro de Sanidad de su Gobierno entre 1992 y 1993 y de Seguridad Social y Trabajo entre 1993 y 1996, de quien destacó su “intachable integridad moral”. “Quiero manifestar que si pudiera designarlo hoy para formar parte de un Gobierno de España que yo presidiera, lo volvería a hacer”, escribió González en alusión a la “competencia y capacidad intelectual” del que después fuera presidente de la Junta de Andalucía.