El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha rechazado este martes el recurso presentado por el ex vicepresidente del Gobierno y ex líder de Podemos, Pablo Iglesias, donde le instaba a indagar si hubo una “investigación policial regular o irregular” respecto a la tarjeta telefónica que su antigua asesora Dina Bousselham perdió con el robo de su móvil en 2015, apuntando de esta forma a un operativo similar al de 'Kitchen', informa Ep.
Iglesias presentó un recurso contra la decisión de García Castellón de dar por finalizada la investigación judicial. Pablo Iglesias alegó que era necesario continuar la fase de instrucción porque no se había indagado “la supuesta facilitación de la información de la tarjeta a la Dirección Adjunta Operativa (DAO) o la posibilidad de existencia de investigación policial regular o irregular respecto de la información contenida en la misma”.
La tesis de que Villarejo estuvo detrás de la filtración a varios medios del contenido de la tarjeta para perjudicar a Podemos debería haber sido la “hipótesis principal” de García Castellón, según le indicaron la Fiscalía Anticorrupción y la Sala de lo Penal, si bien el magistrado se centró en intentar obtener indicios para imputar a Iglesias.
El titular del Juzgado de Central de Instrucción Número 6 concluyó el pasado 29 sus averiguaciones sobre esta pieza separada número 10 del denominado 'caso Villarejo', donde se investigaba el recorrido que tuvo la mini SD desde que se produjo el robo del teléfono móvil de Bousselham hasta que parte de la información que almacenaba apareció publicada. El juez adoptó esa decisión después de que la Policía le entregara un último informe en el que concluía que era imposible acceder al contenido de la tarjeta, una diligencia solicitada por García Castellón por si se pudiera desprender que fue Iglesias quien la dañó.
Cuando recibió el contenido del informe, y ante la imposibilidad de imputar al ex líder de Podemos, García Castellón decidió dar por finalizada la instrucción pese a que restaban tres testigos por comparecer, incluida Dina Bousselham y el líder de la brigada política, Eugenio Pino, a quien Villarejo dijo que entregó una copia de la tarjeta que acabó en los medios. Precisamente este miércoles estaban citados ambos y la expareja de Bousselham, pero la huelga de letrados de la administración de justicia ha obligado a suspender las declaraciones.
García Castellón ha ratificado ahora su decisión de dar por finiquitada la instrucción de 'Dina'. “En el recurso no se justifica la necesidad de la prórroga, ya que se basa en un supuesto hipotético, en posibilidades y futuribles, sin sustento indiciario lo suficientemente relevante como para conllevar que se reforme el citado auto”, ha expuesto.
A juicio del magistrado, la petición de Iglesias se basa solamente en “una simple hipótesis o posibilidad”, esta es, que de la declaración como testigo del ex DAO Eugenio Pino se puedan derivar nuevas diligencias.
Además, ha destacado que la Fiscalía Anticorrupción coincide con él en que la investigación de esta pieza separada de 'Tándem' debe darse por terminada, en su caso, argumentando que no resulta previsible que de la comparecencia de Pino surja la necesidad de acordar más diligencias, debido al “carácter limitado” con el que la Sala de lo Penal ordenó tomar declaración al exDAO, Bousselham y su pareja, Ricardo Sa, así como a peritos policiales, antes de cerrar estas pesquisas.
A este respecto, el instructor ha recordado que la Sala de lo Penal fijó en su momento que debía escucharse a Bousselham para que aclarara si “consiente, tolera, y acepta” que Iglesias conociera el contenido de su tarjeta telefónica; y a Sa para “explicar algunas lagunas” acerca del robo del móvil y de la recuperación de la mini SD; al tiempo que apuntó que la declaración de Pino podía ser limitada porque está imputado en otra pieza separada, 'Kitchen'.
El origen del caso
Los hechos investigados se remontan a noviembre de 2015, cuando a la pareja de Bousselham le robaron el abrigo mientras estaban en el IKEA de Alcorcón con el teléfono móvil de ella dentro.
Justo dos años más tarde de ese robo, en noviembre de 2017, aparecieron en el domicilio de Villarejo un disco duro y dos memorias USB en los que se almacenaban unas carpetas denominadas 'DINA 2' y 'DINA 3', que contenían archivos procedentes de la mini SD del móvil sustraído a Bousselham.
En 2019, se creó una pieza separada dentro de la macrocausa sobre Villarejo ('Tándem') para indagar en este suceso. En 2020, García Castellón procesó al comisario y a dos periodistas por presuntos delitos de descubrimiento y revelación de secretos.
Asimismo, elevó una exposición razonada al Tribunal Supremo (TS) para investigar al ex vicepresidente del Gobierno y líder de Podemos Pablo Iglesias --aforado en ese momento-- por descubrimiento y revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos y acusación o denuncia falsa y/o simulación del delito, pero el TS lo rechazó y le encomendó seguir indagando, encargándole estas últimas testificales.
El juez esgrimió entonces que la “única explicación posible” para los daños sufridos por la mini SD es que se provocaran cuando estaba en poder del ex dirigente 'morado', a quien llegó, tras pasar de mano en mano, y meses después de recibirla se la devolvió a su legítima dueña.
Recurso de Vox
Vox, que ejerce la acusación popular, pidió al instructor que siguiera indagando al estimar que aún había diligencias por practicar, incluida la declaración de Iglesias como imputado.
Pero García Castellón, en un reciente auto, también rechazó dilatar las pesquisas judiciales para llamar al ex vicepresidente del Gobierno como investigado al considerar que, si no es posible “determinar la producción de los daños en la tarjeta del teléfono, ni concretar su autoría”, “no se dan los presupuestos necesarios para atribuir tales hechos al señor Iglesias”.
El magistrado aún debe responder al recurso formulado por Bousselham, que reclama igualmente que la instrucción continúe para averiguar si el robo del teléfono móvil fue un “encargo” al comisario José Manuel Villarejo al estilo de 'Kitchen'.
Bousselham apuntó que podría tratarse de un encargo realizado “por miembros del Gobierno o del Ministerio del Interior, o de la DAO (...) con el objeto de perjudicar al señor Iglesias”.