El Gobierno se ha puesto en marcha para dejar en el olvido la declaración del presidente, Mariano Rajoy. En el Partido Popular son conscientes de la necesidad ocultar la imagen del presidente sentado ante un tribunal respondiendo a las acusaciones del caso Gürtel, una situación que han tratado de evitar a toda costa y que ahora buscan diluir con una retahíla de actos con la participación del presidente.
Rajoy tenía la agenda del miércoles 26 de julio vacía. En la página web de Moncloa, donde se recogen los actos y reuniones del jefe del Ejecutivo este día aparecía en blanco, como los fines de semana en los que no tiene ningún compromiso oficial. Sin embargo, Rajoy asistió al evento por el pacto contra la violencia de genero en la sede del partido que no estaba anunciado su presencia ni en la agenda del Gobierno ni en la del partido.
El PP sí había anunciado, tras una rectificación, en su agenda diaria que “el vicesecretario de Política Social y Sectorial del PP, Javier Maroto, y la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, intervienen en un acto de apoyo al Pacto de Estado contra la Violencia de Género”. Nada más.
Rajoy fue recibido con sonrisas y aplausos. Nadie en la sede de la formación conservadora parecía admitir que el líder del partido había pasado por uno de los momentos más difíciles ante los abogados de la acusación de uno de los casos judiciales que azota al PP. Ya se había puesto en marcha la estrategia para tratar de olvidar.
El presidente no admitió preguntas y solo dijo unas palabras en las que, sin nombrar en ningún momento que se trataba del caso Gürtel,señaló que había acudido a “intentar aclarar algunas cosas o qué podría yo aportar de algunos acontecimientos que, sin duda, interesan a la Justicia española”. En definitiva, para Rajoy cerraba el asunto tras confirmar que había “respondido a lo que se me ha preguntado” porque “en el Partido Popular ha habido sus problemas y sus historias, como las ha habido, y muchas, en otras fuerzas políticas distintas”.
No será la única participación pública de Rajoy de esta semana. El presidente tiene programada para este jueves la entrega de las quince Medallas de Oro al Mérito en el Trabajo a personalidades como la presentadora de televisión María Teresa Campos, el baloncestista Pau Gasol, la bailarina Aída Gómez, el músico Pedro Iturralde, al sindicalista de CCOO y superviviente de la matanza del despacho laboralista de Atocha Joaquín Navarro o a la patronal CEOE.
La Audiencia Nacional anunció que aceptaba la petición de la acusación popular ejercida por la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (ADADE) para que Rajoy prestase declaración como testigo en el caso Gürtel el 18 de abril. El presidente propuso las fechas del 26 o el 27 de julio, coincidiendo con el calendario de publicación de los datos de la EPA. Aunque trató de que se aprobara una declaración por vía telemática el 30 de mayo el tribunal dicta que tendrá que declarar en persona. El 9 de junio el consejo de ministros aprueba las Medallas de Oro al Mérito en el Trabajo, posteriormente se coloca para el jueves 27 de julio el acto de entrega.
Publicación de la EPA
Con este movimiento el Partido Popular consigue mostrar al presidente en fotografías con personalidades relevantes. No será un acto banal, el presidente además dará un discurso en un día que coincide con la publicación de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que ya ha adelantado la ministra de trabajo, Fátima Báñez, que serán bastante buenos.
La semana la rematará con una rueda de prensa el viernes en la que hará balance anual del curso político, en el que se espera que se centre en el relato de la recuperación económica, los buenos datos de empleo y la capacidad del Gobierno para llegar a acuerdos, que fructificaron en los presupuestos de 2017 o el pacto contra la violencia de género, pese a la minoría parlamentaria.
Fuentes del PP admitieron ante las preguntas de eldiario.es que si enfrentarse a los periodistas era perjudicial tras la declaración ante el tribunal: “Todo lo contrario, no tenemos nada que ocultar y bastante que explicar sobre los avances que estamos consiguiendo para mejorar la vida del conjunto de los españoles a través de la mejora de la situación económica y del empleo”.
Con estas intervenciones y con las vacaciones de verano de por medio, el Partido Popular espera comenzar el nuevo curso en septiembre sin la mácula de la corrupción sobre Rajoy.
De momento, los populares ya han conseguido que la imagen inédita de un presidente del Gobierno entrando en la Audiencia Nacional para declarar haya sido imposible de captar para los medios, con el despliegue de camiones en las inmediaciones del tribunal que impedían fotografías y grabar directamente al presidente.