Con un ligero retraso respecto al plan previsto inicialmente, el Gobierno ha dado luz verde a los Presupuestos Generales del Estado para 2022. Los dos socios de la coalición no ocultan un cierto entusiasmo al aprobar las cuentas con mayor inversión en políticas sociales e infraestructuras de la historia, que permite, entre otras cuestiones, elevar un 46%, por ejemplo, el dinero destinado a vivienda o poner el foco en las medidas destinadas a los jóvenes que, según ha explicado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, contarán con 12.550 millones para “mejorar las oportunidades”. En Moncloa están convencidos de que las cuentas supondrán un espaldarazo para la coalición una vez la pandemia de la COVID-19 quede atrás y, aunque con menos boato que en las ocasiones anteriores, Pedro Sánchez y la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, han protagonizado un encuentro para institucionalizar el acuerdo. Ambas partes consideran que salen reforzadas tras una intensa negociación.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado que el Gobierno “sin duda sale reforzado” de la negociación presupuestaria, a pesar de las discrepancias que en los últimos días se han aireado. La responsable de presentar los Presupuestos ha reconocido que siempre es complicado negociar unas cuentas públicas y que cada ministerio reclama los máximos recursos posibles para desarrollar sus políticas. “No tenía dudas en relación a que al final habría acuerdo, lo habría pronto y cumpliríamos para que el 1 de enero entren en vigor”, ha afirmado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario.
También la vicepresidenta segunda ha obviado las tensiones en las negociaciones y se ha limitado a asegurar que en el Gobierno ha habido “sintonía” entre ambas partes antes de agradecer a los equipos que han desencallado las propuestas del PSOE y Unidas Podemos para cerrar un texto final de presupuestos, dirigiéndose directamente “al equipo de la ministra de Hacienda” y al de la coalición que ella lidera.
Díaz ha enfatizado que las cuentas supondrán “una inversión superior a los 40.000 millones de euros”, que permitirán “iniciar un cambio de modelo productivo” para presentar “una nueva realidad en España” y ha destacado que por “primera vez” se superará “una cifra de 12.000 millones de euros en políticas transversales”. Entre los beneficiados de esas políticas, la líder de Unidas Podemos ha citado a los jóvenes. En su intervención ha recordado que se incrementarán “los 2.100 millones de euros para becas”, parte de ese presupuesto se destinará a “facilitar becas” para que los más jóvenes de “familias humildes” puedan “acceder a los procesos de las altas instituciones del Estado”.
Tanto Montero como la vicepresidenta han enviado recados al PP. La titular de Hacienda le ha acusado de estar en una campaña de “desgaste” que, a su juicio, casa mal con la presentación de las cuentas públicas que recogen una inversiones récord. “La ansiedad no es buena y lo que necesita este país es que el principal partido de la oposición arrime el hombro”, ha advertido Montero, convencida de que los ciudadanos no quieren que la oposición “se convierta simplemente en un látigo” sino que sea “útil y constructiva”.
Díaz ha contestado a las palabras de Pablo Casado, que cuestionó el bono joven para vivienda con el argumento de que si tienes trabajo puedes alquilar una casa, reprochándole que desconozca “completamente el mercado laboral español, incluso la estructura salarial de su país”.
La vicepresidenta segunda tampoco ha querido obviar el encuentro mantenido por los populares este fin de semana, para destacar que “frente a la tesis de la destrucción del Estado de bienestar” anunciadas por “Casado el pasado fin de semana en su convención”, “el Gobierno de España trabaja para seguir fortaleciendo una sociedad que debe ser más igual y más justa”.
Unidas Podemos ha defendido la perspectiva feminista de los presupuestos, destacando que son unas cuentas “expansivas e inclusivas”. “Las mujeres en España avanzamos de la mano de políticas públicas que son importantes para nuestro país”, ha celebrado. Teniendo en cuenta esta cuestión, también han querido poner en valor los avances en dependencia, unos cuidados muy feminizados.
La partida destinada a Dependencia se incrementará en 600 millones de euros en los próximos presupuestos, según confirman fuentes del Ministerio de Derechos Sociales, liderado por Ione Belarra. Fuentes de su departamento destacan que ese apartado protagonizará un “aumento histórico”. “La partida es de 1.200 millones de euros, el doble que en 2020”, indican.
La ministra de Hacienda ha admitido que ahora le toca intensificar las conversaciones con los grupos parlamentarios, aunque ha señalado que ya ha tenido contactos, y ha señalado a las fuerzas parlamentarias de la investidura y que apoyaron las cuentas de 2021 como prioritarias en la negociación mientras que el año pasado la parte socialista del Gobierno intentó sumar a Ciudadanos, pese a las reticencias de Unidas Podemos y los demás partidos de izquierdas. “Son todos prioritarios y ojalá este año, como el pasado, contemos con prácticamente todos los grupos excepto las fuerzas de derechas”, ha apostillado.
En todo caso, ha asegurado que por ahora las conversaciones “transcurren con normalidad” y que ya se ha incorporado al proyecto presupuestario algunas de las demandas de ERC y PNV, ambos imprescindibles para que el Congreso apruebe los presupuestos. lo que les ha reclamado es que “ambas sean razonables a la hora de plantear sus demandas y que puedan permitir que el el proyecto pueda iniciar su tramitación [superando las enmiendas a la totalidad], y vía enmienda, se incorporen los elementos que para ellos importan”. Montero ha dejado claro, eso sí, que las negociaciones serán discretas para que “conduzcan a buen puerto”.