Con el feminismo en alza, la atención a las declaraciones y propuestas que los partidos hacen sobre igualdad y violencia de género para el 28A es más elevada que nunca. Estas son algunas de las medidas que PSOE, PP, Unidas Podemos y Ciudadanos han incluido en sus programas para las elecciones generales.
Igualdad laboral y cuidados
Para Unidas Podemos, los cuidados deben blindarse en la Constitución como derecho fundamental y garantizar su acceso y provisión. A partir de ahí, el partido de Pablo Iglesias habla de reducir la jornada laboral a 34 horas, aumentar los permisos de maternidad y paternidad hasta las 24 semanas, una ley de igualdad retributiva, mejorar la protección del trabajo a tiempo parcial, una prestación para el cuidado de niñas y niños o aumentar la inversión pública en infancia.
El lenguaje es muy diferente en el programa del PP: “Promoveremos la igualdad en las empresas, favoreciendo que las propias compañías fijen objetivos en ese sentido”. Mencionan un Pacto Nacional para la Conciliación Nacional y la Racionalización de los Horarios o “impulsar” la inserción de las mujeres en el mercado laboral.
Para el PSOE, los puntos principales son ampliar su Ley de Igualdad Laboral y trabajar en una norma futura sobre usos del tiempo, la creación de una Oficina Estatal de lucha contra la discriminación laboral dentro de la Inspección de Trabajo o ampliar la educación de 0 a 3 años y el sistema de dependencia.
Ciudadanos también habla de garantizar la conciliación en la Constitución. Flexibilizar las reducciones de jornada por cuidado de familiares, fomentar la transparencia salarial o el currículum neutro en los procesos de selección o cheques guarderías son otras de sus apuestas.
Violencias machistas
Un punto en común de todos los programas: desarrollar el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, un documento con 200 medidas de las que solo se han puesto en marcha unas pocas.
La propuesta estrella del PP es extender la prisión permanente revisable para algunos supuestos de violencia de género. Habla también de prevenir la violencia desde la educación, de medidas concretas para las mujeres del mundo rural o de promover protocolos contra el acoso sexual o el acoso callejero.
El PSOE se centra en potenciar las unidades de valoración forense de los juzgados, mejorar el acompañamiento judicial personalizado de las mujeres o intervenir en educación. Tanto su programa como el de Unidas Podemos incluye una modificación del Código Penal para cambiar el concepto de consentimiento y que “todo lo que no sea sí, es no”.
El partido morado propone también un plan estatal contra las violencias machistas dotado con 600 millones de euros anuales, una prestación igual al salario mínimo para las mujeres víctimas durante al menos seis meses, y solución habitacional inmediata para ellas y sus hijos.
Ciudadanos se centra en el Pacto de Estado y habla de establecer “controles rigurosos” sobre el uso de sus fondos. También plantea una ley para la prevención, asistencia y protección de las mujeres frente a la violencia sexual.
Aborto, vientres de alquiler, prostitución
El derecho al aborto y la gestación subrogada polarizan el debate. Sobre el primer tema, el PSOE y Unidas Podemos proponen recuperar el derecho de las menores de 16 y 17 años a interrumpir voluntariamente su embarazo sin el consentimiento de sus padres (un punto que el Gobierno del PP eliminó de la norma actual), mientras PP y Vox recrudecen su discurso y cargan contra lo que, afirman, no es un derecho. El partido de Pablo Casado habla en su programa de la “cultura de la vida” y de una ley de apoyo a la maternidad. Ciudadanos, por su parte, ha optado por silenciar el asunto en su programa.
En el segundo caso, solo dos partidos se han pronunciado abiertamente, y de forma radicalmente contraria. El partido de Albert Rivera habla de aprobar un ley de gestación subrogada “altruista y garantista”, similar a la de Canadá y Reino Unido: “Garantizará los derechos de todas las personas intervinientes en el proceso, en especial los de las mujeres gestantes y los de los menores nacidos mediante esta técnica de reproducción asistida”. En el lado opuesto, el PSOE rechaza esta práctica “porque socava los derechos de las mujeres, en especial de las más vulnerables, mercantilizando sus cuerpos y sus funciones reproductivas”. Su propuesta es “actuar frente a las agencias” de intermediación, sin más concreción.
No es el único asunto en el que el PSOE y Ciudadanos contraponen sus modelos. También lo hacen en la custodia compartida. Para los primeros, la premisa es rechazar la custodia compartida impuesta “para garantizar el derecho superior del menor”, mientras que para los segundos, el objetivo es el contrario: dar preferencia por ley a esa opción en casos de separación o divorcio.
La prostitución, uno de los debates feministas más controvertidos, tiene cabida solo en el programa del PSOE, que aboga por abolirla mediante medidas que sancionen la demanda, consumo y la contribución a la prostitución ajena. Tanto en el programa socialista como en el Unidas Podemos se incluye la puesta en marcha de una ley contra la trata de personas.
Contra la discriminación de las deportistas
El deporte se ha hecho hueco en los programas de este 28A. Los récord de estadios llenos para ver a las jugadoras de fútbol disputar partidos importantes y las denuncias cada vez más presentas de las deportistas que señalan los obstáculos, incluso legales, que aún condicionan sus carreras han conseguido repercusión en las propuestas electorales.
Unidas Podemos propone adaptar la Ley del Deporte “a la realidad del deporte femenino” para reconocer las competiciones de la máxima categoría o establecer premios y dietas iguales para hombres y mujeres. Algo similar es lo que aparece en el programa de Ciudadanos, que habla perseguir las 'cláusulas antiembarazo' en los contratos, acabar también con la discriminación en los premios que cuenten con dinero público o facilitar el retorno de las deportistas tras la maternidad. El PP se limita a hablar de “fomentar” el deporte femenino. Por su parte, el PSOE propone crear un Observatorio de Igualdad en el Deporte para generar planes de igualdad o “impulsar iniciativas que contribuyan a alcanzar la igualdad real y efectiva en el deporte”.